Las capturas de jurel el próximo año en la división pesquera IXa -correspondiente a las aguas atlánticas ibéricas, desde Fisterra hacia el sur- no deberían superar el próximo año las 35.000 toneladas. Esta es la recomendación emitida por el grupo de expertos en esta pesquería del ICES (Consejo Internacional para la Exploración del Mar, por sus siglas en inglés) el pasado mes de julio y trasladada a las autoridades de la Unión Europea de cara a la correcta gestión del caladero para garantizar su viabilidad futura.
El tope de pesca recomendado representa, de hecho, una cantidad superior a las descargas contabilizadas en 2012, cuando en aguas de Fisterra hacia el sur se contabilizaron 25.000 toneladas de capturas, según el propio grupo de expertos del ICES. En concreto, el 31% por arrastreros, el 51% por cerqueros y el 18% por la flota artesanal.
Los científicos reconocen que la mortalidad por pesca descendió para este stock de jurel -el del sur- en los últimos dos años, mientras que la biomasa de reproductores ha disminuido gradualmente desde 2007 y está en la actualidad alrededor de un 30% por debajo del promedio histórico. Además, los científicos del ICES constatan que el reclutamiento -incorporación de individuos jóvenes a la pesquería- está por encima de la media de 2011. En cuanto a la distribución, la mayoría de peces de más edad están en aguas de Galicia y norte de Portugal, mientras que la distribución de los menores se extiende por el sur.
