Tras dos días de reuniones en la capital mauritana, Nuakchot, entre la UE y Mauritania para debatir el pacto pesquero, el acuerdo final no podía ser peor para los intereses de la veintena de buques gallegos expulsados del caladero hace ya casi 14 meses: ni posibilidades de pesca ni participación de ningún cefalopodero en una campaña experimental para estudiar un nuevo modelo de gestión del recurso y su situación biológica, fórmula que era "el último atisbo" de esperanza para lograr actividad para alguno de los barcos afectados. El acuerdo, sin embargo, logra mejoras en las condiciones técnicas de pesca de atuneros o pelágicos y la vuelta al caladero de la flota marisquera andaluza, entre 25 y 30 barcos de Huelva, según estimaciones del sector.

Esta "mejora", destacada por el Ministerio de Agricultura, se acompaña además de un aumento de las posibilidades de pesca accidental de pulpo, hasta un 8% del total de capturas, lo que, según los cálculos del portavoz de los cefalopoderos gallegos, el responsable de CIG-Mar, Xavier Aboi, equivale a las capturas de "tres, cuatro o cinco cefalopoderos", con lo que se desmontan "los argumentos esgrimidos hasta ahora de criterios biológicos para negarse a dar posibilidades de pesca de pulpo". "Es vergonzoso e indignante, aunque nos alegremos por los andaluces", sentencia.

La decepción en la flota cefalopodera era ayer enorme. El presidente de la Asociación Nacional de cefalopoderos (Anacef), Francisco Freire, resumía lo sucedido con un directa afirmación. "Se confirma la exclusión de la flota cefalopodera definitivamente", indicó.

"Desconocemos si los responsables españoles van a mantener el compromiso que han reiterado desde que se firmó el acuerdo, de que no lo admitirían sin cefalopoderos y que si esta flota no entraba trataría de lograr el rechazo en el Parlamento Europeo o lo denunciaría por baja utilización", explica Freire.

Sobre este asunto, el Ministerio respondió ayer que el Gobierno valorará junto al sector interesado, las comunidades autónomas afectadas y los eurodiputados "los siguientes pasos a dar". Además, recordó que el objetivo era lograr "mejoras en las condiciones técnicas de los marisqueros y la participación de los cefalopoderos en la campaña experimental" y que ambos "fueron defendidos con la misma intensidad". "El primero se cumplió y el segundo aún no, por la negativa de Mauritania, que creemos injusta y basada en premisas erróneas aunque se trata de una decisión soberana", señaló ayer la Secretaría General de Pesca, que avanzó que seguirá trabajando para lograr posibilidades de pesca para los cefalopoderos en los pactos de la UE con Senegal -se pedirá a la CE la inclusión de esta flota- en Guinea Bissau o Guinea Conakry.

La Consellería do Mar, por su parte, lamentó "la negativa de las autoridades de Mauritania" y afirmó que este acuerdo no puede ser "una imposición a un país soberano", para luego señalar que la Xunta "confía y apoya" la labor del Ministerio, que seguirá trabajando en la búsqueda de "otras alternativas para asegurar que la flota cefalopodera vuelva a faenar".

Los afectados, por su parte, anunciaron nuevas movilizaciones para protestar por la "venta" del sector "a los intereses de los grandes pelágicos holandeses y polacos, así como a los marisqueros" andaluces, según confirmó Aboi tras una asamblea de urgencia celebrada ayer en Marín.