José Domínguez Buiturón (Sardiñeiro, Fisterra, 1959) es el patrón de la Cofradía de Pescadores Virgen del Carmen de Corcubión desde hace 26 años. Domínguez mantiene una lucha contra la pesca de arrastre, que perjudica, según denuncia, la flota artesanal del pósito. La propuesta de cambiar el Código Penal para tipificar el furtivismo como delito le parece excesiva.

-¿Por qué volvió a presentar su candidatura?

-Porque no se quería presentar nadie. Me pidieron que siguiera y decidí hacerlo un poco más, aunque ya me queda poco para la jubilación.

-Se ve, entonces, que le quieren después de tantos años...

-Sí, claro. Pero les dije que si me elegían no iba a ser para no hacer nada. Ahora empezamos una lucha por una pesca sostenible y artesanal. Creemos que es viable y que tiene futuro. Se pueden mantener los puestos de trabajo actuales, incluso multiplicarlos por dos o por tres.

-¿Qué hay que hacer para conseguir ese objetivo?

-Es muy sencillo. Es necesario desplazar el arrastre 12 millas. Tarde o temprano lo harán, porque si seguimos así, no habrá pesca ni para ellos ni para nosotros.

-¿Por qué opina que se debe desplazar el arrastre?

-Trabaja muy encima de los barcos artesanales. Rastrean en poco fondo y destruyen los sedimentos, lo que desova el pescado, los corales de las piedras? Están cometiendo muchas atrocidades y nuestra obligación es contárselo a las administraciones, aunque ellas miren hacia otro lado. Está demostrado que la actividad de estos barcos hace daño al recurso. Los expertos advierten de estos problemas en sus informes. Portugal, de hecho, se está deshaciendo de todos los arrastreros.

-Mantuvo una reunión recientemente con el secretario general de Pesca, Andrés Hermida, para tratar este asunto, ¿no?

-Sí. Me dijo que iba a trasladar nuestras demandas a sus superiores, pero no vemos ni resultados ni respuestas. Por eso hacemos continuamente movilizaciones y protestas, con el objetivo de que nuestra voz llegue a Bruselas. Estamos hablando de 13.000 puestos de trabajo directos en la pesca de bajura y de que podrían crearse otros tantos, si se cambiasen las cosas.

-¿Es la bajura la principal actividad económica del pósito?

-Sí, aunque también tenemos marisqueo. Pero las especies que mayores ingresos aportan a la cofradía son el pulpo, la merluza y el erizo.

-¿Perjudica mucho el furtivismo a los mariscadores de Corcubión?

-Sí. Pero no como para sacar una ley que penalice a los mariscadores ilegales con de dos a seis años de cárcel por coger, por ejemplo, un caldero de berberechos. Entonces los Pujol, entre otros, ya deberían estar en la cárcel por robar tantos millones. Es quitarle libertades a la ciudadanía y más adelante nos vamos a arrepentir.

-¿A qué libertades se refiere?

-A mí no se me ocurre volver a manifestarme en Santiago porque aún estoy sufriendo en mis carnes las consecuencias de cuando lo hicimos (una multa que ya recurrimos). A ese tipo de libertades me refiero.

-Las descargas en la lonja aumentaron un 14,4%. ¿A qué se debe este incremento?

-Creo que los precios de venta son atractivos y algunas embarcaciones de otras zonas colindantes a nuestra cofradía deciden venir a descargar aquí por este motivo.

-Tras 26 años como patrón, ¿qué balance hace de las administraciones?

-El gran problema que tenemos en la pesca son los políticos, que no tienen ni idea del mar. Las administraciones nos tratan como si fuésemos negritos tercermundistas. Nos tapan los ojos con dos limosnas, como con las ayudas para desguazar buques. Lo único que quieren es destruir barcos. Nosotros no queremos eso, queremos vivir del sudor de nuestra frente como marineros dignos. Con el tema del arrastre, por ejemplo, solo tienen la valentía de ir a cenar con los representantes de los arrastreros y allí hacen los negocios.

-¿Qué le pide entonces los organismo oficiales?

-Que tengan en cuenta que se están agotando los caladeros y que los arrastreros nos perjudican mucho.

-¿No está de acuerdo, entonces, con la premisa de que no hay artes malas, sino mal utilizadas?

-Es como la frase que me decía mi madre y que yo no entendí hasta muchos años después: 'es muy fácil decir te quiero, quererte no'. Ya tengo mis años y sé cómo van las cosas. Yo no pico en ese anzuelo.

-La flota artesanal se queja de numerosas trabas administrativas y las tasas elevadas. ¿Qué opina usted?

-Ese no es el problema más importante. Tiene más relevancia que nos dejaran con el culo al aire cuando la Administración nos dijo que teníamos que mandar nosotros las hojas del diario de a bordo. Nos cargan de trabajo. Si realmente la Administración tuviese en cuenta a la flota de bajura, que se incrementaran las tasas no supondría ningún problema. Pero todo nos parece mucho cuando estamos malviviendo.

-¿Qué balance hace de 2014?

-El año pasado fue regular, tirando a malo. Las pesquerías no nos acompañaron nada. Nosotros queremos que la situación mejore en 2015, pero quién sabe. No hay ningún año igual a otro. Todavía estamos empezando, aunque la cosa no pinta mejor.