El Ministerio de Agricultura mantendrá abierta la pesquería de anchoa en el caladero del Cantábrico Noroeste, por lo que rechaza así la petición de Cantabria de prohibir la pesca de la especie en esta zona. El Gobierno cántabro solicitó el pasado 13 de agosto un cierre "inmediato" de la actividad ante las numerosas quejas del sector pesquero por los bajos precios del recurso y por el riesgo de sobrepesca.

La directora general de Pesca de Cantabria envió un escrito al Ejecutivo central en el que mostraba su disconformidad con la ampliación del 10% en el cupo de anchoa para este año. "La pesquería sigue abierta con normalidad hasta que la cuota se agote", afirma el subdirector de Control e Inspección del Ministerio, Héctor Villa, en su respuesta, en la que explica al Gobierno cántabro que la cuota de la especie asignada para este año es de 22.923 toneladas, al sumarse las 1.673 correspondientes al excedente de 2014.