El cerco gallego que opera en gestión conjunta (compartiendo sus respectivas cuotas) mantiene una protesta constante prácticamente desde 2014, año en que se produjeron tensas manifestaciones. Con quejas continuas sobre la falta de cupos de sus principales especies (xarda y jurel sobre todo), en las últimas semanas han intensificado sus movilizaciones, con un amarre que está a punto de cumplir un mes y una acampada en San Caetano (Santiago). Pero, ¿qué lleva a la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga) a sentirse tan menospreciados por la Xunta y el Gobierno? Estas son las claves de su protesta:

¿Cuántos barcos están amarrados y por qué? Según la Xunta, son 112 buques los que están en gestión conjunta amarrados desde hace más de cuatro semanas porque acabaron casi todas las cuotas de este año. Son casi el 75% de los 151 barcos de este segmento que hay en Galicia. En las dos zonas que afectan a los buques gallegos -la VIIIc (de Fisterra a Vizcaya) y la IXa, (de Fisterra al golfo de Cádiz)-, en toda España hay 360 cerqueros.

¿Cuántos buques van por libre? En Galicia 42 barcos gestionan sus cuotas de forma individual, la mayoría de O Barbanza y A Mariña y cuentan con cupos mayores. Acaban de constituir una asociación para defender sus intereses, porque se oponen al reparto que propone Acerga.

¿Cuánta cuota tenía Galicia para este año? La flota contaba para este año con 3.006 toneladas de caballa -o xarda- (un 15% menos que hace un año), con 10.579 de jurel (un 17,5% más que en 2014) y un tope de 6.000 kilos a la semana por barco de sardina (un 78,5% menos). Los de Acerga contaban con 3.596 toneladas de jurel, un 16,7% menos que en 2014 (6.804 toneladas). Los barcos en gestión conjunta tenían 1.692 toneladas de xarda. Antes del amarrar le restaban 500 toneladas de xarda.

¿Qué reclaman? Acerga pide desde su creación la derogación del plan de gestión firmado en 2013 para los años 2014 y 2015 que estipula un reparto según las capturas históricas. La asociación pide que los cupos se otorguen por número de barcos y tripulantes de cada comunidad.

¿Qué dicen desde la Xunta y el Gobierno? Las diferentes reuniones mantenidas con la Consellería de Mar y con la Secretaría General de Pesca no arrojaron el resultado esperado por el sector. Desde el Gobierno central ofertaron intercambiar las 500 toneladas que les quedaban de xarda por otras tantas de jurel para que pudieran volver al trabajo a partir del pasado lunes. El secretario general de Pesca, Andrés Hermida, se comprometió por escrito a revisar el plan de gestión con las comunidades implicadas. Acerga lo rechazó porque no cumplía con sus requisitos.

¿Por qué salen perdiendo con el reparto histórico? Galicia, antes de la entrada en vigor de las cuotas europeas, se puso unos límites a la hora de faenar que no tenían otras flotas del Cantábrico Noroeste. Esto produjo que los barcos de otras comunidades, inferiores en número a los gallegos, pescaran más cantidad, lo que les ofreció privilegios.

¿Por qué firmaron el acuerdo entonces? El sector alega que en la reunión en la que se firmó este plan de gestión no se encontraban correctamente representados (Acerga, por aquel entonces no existía), en relación al expresidente de la Federación Galega de Confrarías, Benito Iglesias.