La asociación mayoritaria del cerco de Galicia, Acerga, celebró ayer una asamblea en la que ratificó su decisión de recurrir ante los tribunales el nuevo plan de gestión del Cantábrico Noroeste. Este grupo de armadores, que secundan una acampada ante el edificio administrativo de la Xunta en Santiago y amarraron sus buques el pasado 22 de octubre, ya había avanzado que pretendía adoptar medidas legales contra el documento, desde un recurso de inconstitucionalidad a demandas personales contra los responsables políticos.

Las protestas del sector tienen su origen en el reparto de cuotas establecido por este plan y el anterior, anulado por la Audiencia Nacional. Un reparto que consideran "injusto" y que, demandan, debe ser sustituido por un reparto lineal por tripulantes.