De las 142 embarcaciones de cerco de Galicia que pescan en el caladero Cantábrico Noroeste, 40 de ellas -casi un tercio-, tienen asignada menos del 0,5% de la cuota total de la pesquería. Un porcentaje que incumple el Plan de Acción de la Flota Española, firmado por el Ministerio de Agricultura y parte del Programa Operativo del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca 2014-2020, que establece que ningún barco de esta modalidad "puede disponer de menos de un 0,5 % del censo total". Pese a ello, el nuevo plan de gestión del Cantábrico Noroeste, recientemente publicado por el Gobierno, no señala suelo alguno para el reparto.

Fuentes del Ministerio de Agricultura explicaron a este diario que ningún barco de cerco en el Cantábrico Noroeste "debe contar con un mínimo de posibilidades de pesca para permanecer en la pesquería", ya que para estos buques no existe la posibilidad de hacer transferencias de cuota ni temporales ni definitivas. Las mismas fuentes explican que este tope mínimo se refiere a la modalidad de arrastre de fondo, aunque no aclaran si el 0,5% recogido en el plan de acción se trata de un error.

El portavoz de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga), Andrés García, acusa al Gobierno de "mentir" al enviar a Bruselas un plan "que no se cumple" y reclama al Gobierno que diga "la verdad".

Según el nuevo plan de gestión de la pesquería del Cantábrico Noroeste, de todo el censo de barcos de cerco para el caladero (280) un total de 55 unidades no llegan a este porcentaje mínimo. De estas embarcaciones, 42 son de Galicia, aunque dos de ellas aparecen como "desguazadas" en el censo oficial de la flota del propio Ministerio. Este predominio gallego, sin embargo, no se repite entre los barcos que más cuota poseen, ya que la gran mayoría de ellos proceden del País Vasco y Cantabria. Tan solo hay tres barcos gallegos entre los 10 que detentan los mayores porcentajes, que varían desde el 4% hasta el 6,8%, a pesar de que la flota gallega representa el 52% del total de la modalidad.

"Es un sistema que nos perjudica porque en Galicia tenemos barcos de muy poco porte, llevamos siempre las de perder", explica García. Para el portavoz de Acerga estos datos prueban que todo lo que vienen denunciando "es cierto". Esta organización -que agrupa a la mayoría de barcos gallegos de cerco- aboga por la suspensión del reparto, que desde 2013 se lleva a cabo mediante un sistema de asignación individual de posibilidades de pesca en función de capturas históricas. Las asociaciones como Acerga gestionan la cuota de sus socios de manera conjunta para luego repartirla entre los buques que la integran, una circunstancia que, según su portavoz, permite que los barcos con menos cuota puedan subsistir.

Pero no todo el cerco está en contra del reparto. En el otro lado se sitúa Cerqueiros Galegos -creada recientemente y que agrupa a unos 30 barcos-, que no se opone a la distribución actual y centra sus demandas en conseguir más cuota. El presidente de la asociación, Manuel Muñiz, describe el reparto actual como "el mejor que puede tener Galicia", ya que recibe "el 53% de los cupos del Cantábrico". El presidente de Cerqueiros Galegos indica que es necesario separar entre zonas cuando se hacen estos cálculos. "Hay barcos que acumulan una gran cantidad de históricos porque se dedicaron a pescar en todas las zonas del caladero, pero solo los grandes pueden hacer eso, a los demás no les compensa", aclara Muñiz, que se muestra partidario de centrar el debate en la cuota "que podemos pescar".

El pasado martes las dos organizaciones acercaron posturas en una reunión con la Consellería do Mar al considerar prioritaria la situación de los barcos que están "sin cuota". Como resultado de ese encuentro, la Consellería está realizando un estudio para establecer una propuesta de mínimo de capturas para estos buques, con el objetivo de presentarla ante el Gobierno central. Acerga fija el número de embarcaciones sin posibilidades de pesca en 40, aunque no especifica si también utilizan como baremo el 0,5% que marca el plan de acción. Cerqueiros Galegos, en cambio, habla de unos 15 buques.