La asamblea de la Asociación de Armadores do Cerco de Galicia (Acerga) celebrada esta mañana en Santiago ha decidido, tras una votación muy ajustada, levantar el amarre que secunda el sector desde el pasado octubre para exigir un reparto "justo" de las posibilidades de captura y volver a faenar. Los armadores también levantarán la acampada instalada ante el edificio administrativo de la Xunta en San Caetano después de que el Gobierno se haya negado a cambiar el reparto de cuotas de jurel y caballa en el Cantábrico Noroeste con el argumento de que se encuentra "en funciones".

Los armadores adoptaron esta decisión por su "delicada situación económica" tras tres meses de inactividad. Sin embargo, sostienen que seguirán luchando para lograr un reparto de las cuotas de pesca "más justo" para Galicia.