Las cofradías gallegas reivindicaron ayer su "unidad" e hicieron un llamamiento a participar en la manifestación de mañana, que tendrá lugar en Santiago a las 11.30 horas. Los organizadores señalaron que, de momento, ya hay 200 autobuses contratados, y esperan que acudan unas 30.000 personas.

Las cofradías reafirmaron ayer que, a pesar de la retirada del anteproyecto de Lei de Acuicultura, los motivos para manifestarse mañana en Santiago son "más que suficientes", y exigieron a las instituciones un "cambio de rumbo" en la política pesquera.

"Nos invade un sentimiento de abandono y estamos enfadados e indignados con la Xunta, la Administración del Estado y la UE, porque creemos que no nos defienden como merecemos, porque nos tratan con desigualdad y porque nos arrastran a una muerte segura con sus políticas erróneas". Así comienza el texto que el presidente de la Federación Galega de Confrarías de Pescadores, Tomás Fajardo, leyó en la sede de la organización, en Milladoiro (Santiago), junto a representantes del sector y los sindicatos CIG, CCOO y UGT.

Los representantes de los pósitos citaron nueve razones concretas para no desconvocar la marcha de mañana: La revisión del "obsoleto e injusto" modelo europeo de cuotas y la exclusión de los descartes de ese sistema; la defensa del sector pesquero artesanal; la necesidad de solucionar la "contaminación, mortalidad y regeneración" de las rías; la "falta de reconocimiento" a las propuestas de las cofradías; la "excesiva y compleja" normativa reguladora de las administraciones, así como la escasa capacidad de resolver conflictos y la falta de apoyo en la UE; la investigación de las mareas rojas; la defensa de los productos gallegos y su correcto etiquetado para evitar "engaños"; y un "cambio de rumbo" a la política de desguaces. "Queremos seguir viviendo del mar con un salario digno y que las nuevas generaciones tengan un futuro en el sector", aseveraron.