La Xunta decretó anteayer el cierre de seis polígonos de bateas tras detectar en los análisis efectuados un aumento considerable de los niveles de biotoxinas, entre las que destacan las diarreicas. Los parques de cultivo afectados son Bueu B, Bueu A2, Bueu A1, Portonovo A, Portonovo B y Portonovo C, y todos se encuentran en la ría de Pontevedra, donde ya solo quedan operativos los dos polígonos de Cangas.

Las mareas rojas regresan de este modo a las rías de Galicia después de más de tres meses de ausencia generalizada, aunque los técnicos del Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar) señalan que se trata de un episodio "normal", ya que por estas fechas se registra cada año un repunte importante con motivo del conocido como "afloramiento de primavera", cuando una gran cantidad de microalgas se introduce en las aguas gallegas.