Los buques apátridas Antony y Northern Warrior siguen retenidos en Vigo por su vinculación con infracciones muy graves relacionadas con la pesca ilegal, según informó ayer el secretario general de Pesca en funciones, Andrés Hermida. "Los barcos siguen retenidos en Vigo hasta que el armador deposite la fianza o se resuelva el expediente, que ya se abrió", apuntó el responsable de la Secretaría General de Pesca.

La inmovilización se produjo durante la denominada operación Banderas. El Ministerio precisó, cuando decidió retener los dos buques, que había pruebas de sus lazos con las empresas registradas el pasado verano durante la operación Sparrow II contra la pesca ilegal. Hermida remarcó que esta operación sigue abierta. Sparrow I ya supuso sanciones millonarias a la firma coruñesa Vidal Armadores por pesca ilícita.