El secretario general de Pesca, Andrés Hermida, aseguró ayer que la propuesta para prohibir la pesca de arrastre a partir de los 800 metros de profundidad que discute Bruselas tendrá un impacto "ínfimo" y "nulo" en la actividad de buques españoles.

Hermida indicó que un grupo de trabajo del Consejo de Ministros de la UE consensuó una propuesta para aplicar esa restricción, que será aprobada en el segundo semestre del año, y reiteró que no se trata de un mal acuerdo para la flota nacional. El responsable de Pesca también añadió que "estuvo en juego" restringir la pesca de arrastre de fondo en todos los mares y que el veto se limitará a caladeros "puntuales". "La mayor parte de la flota española que utiliza el arrastre de profundidad lo hace en aguas internacionales y va a poder seguir empleándolo", zanjó Hermida.

Los armadores, en especial los gallegos, se opusieron al planteamiento de Bruselas desde el principio e incluso llegaron a declarar que Madrid dejó "vendido" al sector en las instituciones europeas.