La cofradía de Corcubión (A Coruña) emitió ayer un comunicado en el que su patrón mayor, José Domínguez Buiturón, muestra su rechazo a la creación de una reserva marina -como defienden otros pósitos y organizaciones- entre Portosín y Fisterra. La nota resalta que el líder de esta entidad coruñesa, "con más de 40 años de experiencia trabajando y viviendo del mar", siente "una gran preocupación al ver cómo se destruye la riqueza natural y no se toman medidas correctas al respecto", actuaciones cuestionables en las que incluye la "gran reserva marina" de Portosín a Fisterra "siguiendo los pasos" de la reserva de Lira (Carnota).

El patrón mayor de Corcubión considera prioritarias otras medidas como "separar el arrastre 12 millas de tierra y erradicar completamente las artes de arrastre a la pareja". "Sería hablar con los pies en la tierra y la cabeza en los hombros", sentencia Domínguez, que sostiene que la creación de la reserva implica importantes inversiones "que no sirven de nada si a 100 metros de la reserva destruyen [en referencia a los arrastreros] los fondos marinos y arrasan todo lo que encuentran a su paso".