La entidad ecologista WWF manifestó ayer que la sobrepesca y la pesca ilegal ponen en peligro el futuro y el sustento de "800 millones" de personas de todo el mundo. Lo hizo en un comunicado difundido con motivo del Día Mundial de los Océanos, que se celebra hoy. "Si el océano fuera un país, sería la séptima economía más importante del mundo. Deben tomarse medidas efectivas para frenar la destrucción de las pesquerías", indicó la organización, que destacó que la población mundial de vertebrados marinos descendió un 50% entre 1970 y 2012.