El consumo de conservas de pescados y mariscos registró en 2015 un aumento del 9% respecto a 2010, hasta alcanzar los 4,5 kilos por habitante, con lo que estos productos se erigen como el único producto de la pesca y la acuicultura que incrementó su consumo per cápita en los últimos años, según los datos publicados por la patronal conservera Anfaco-Cecopesca.