La campaña del bonito del norte arrancó este año con escasez de capturas para la flota gallega. Los pescadores se encuentran con "dificultades" para localizar el recurso, que en el inicio de la costera migra desde las islas Azores, según explica el gerente de la Asociación de Armadores de Burela (ABSA), Miguel Neira. El representante de la organización pesquera relata que tan solo dos barcos boniteros realizaron descargas en este puerto -el principal en Galicia para esta especie- durante esta semana.

Neira, no obstante, asegura que los inicios de campaña suelen ser "complicados" y resta importancia a estas primeras sensaciones. "El año pasado tuvimos un mes de junio excelente y al final la costera no salió tan bien como nos gustaría", remarca el portavoz de ABSA, que insiste en que los meses más importantes para la pesca de esta especie son julio y agosto y confía en que la situación cambie "en cualquier momento". "A medida que se sumen más barcos, será más fácil dar con los bancos de peces grandes", sostiene.

La lonja de Burela celebró dos subastas de bonito del norte esta semana, con precios por encima de los ocho euros el kilo. Los compradores llegaron a pagar 8,15 euros el kilo en la puja del miércoles, en la que se vendieron 10.000 kilos de producto que descargaron dos barcos. Mientras, en la del jueves la cifra se elevó hasta los 8,40 euros por kilo, aunque el volumen subastado cayó hasta los 2.000 kilos, capturados por una única embarcación.

Neira también indicó que los precios son ligeramente inferiores a lo esperado y avanzó que, en los meses centrales de la costera y a medida que aumente la oferta, caerán hasta algo más de cuatro euros por kilo.

La campaña del bonito de 2015 cerró con un volumen de negocio de 6,7 millones de euros, lo que supuso un 16% menos que en el ejercicio anterior. Con todo, los armadores prevén mejorar en este 2016 las cifras del año pasado, en el que se comercializaron 1.600 toneladas de bonito entre junio y octubre.