Los precios de la sardina en la jornada de San Juan fueron más bajos de lo esperado tanto en la lonja y los mercados coruñeses. El kilo de la especie cotizó ayer en las plazas a una media aproximada de 8 euros, frente a los 7 euros registrados en 2011, el anterior ejercicio con precios medios más bajos. El año pasado, por ejemplo, este producto se vendió a una media de 10 euros por kilo, una cifra ya de por sí baja.

La lonja de A Coruña subastó ayer 39 toneladas de sardina, casi el triple que las 15 del martes y un 56% más que las 25 del miércoles. Pero el tamaño de la especie, que lastró los precios todo el mes, tampoco acompañó en el día clave para la flota gallega. "Del total descargado, solo unas dos o tres toneladas fueron de talla grande, el resto fue todo mediano", explicó el responsable de caja de la lonja, Ignacio Iglesias. Los precios también fueron variados, aunque sí experimentaron un repunte general, desde los 3 euros que costaba el kilo de tamaño medio hasta los 15 euros por kilo que se llegaron a pagar por los ejemplares más grandes.

Los placeros entraron ayer con fuerza en la puja -al contrario que en días anteriores, cuando prefirieron reservarse- y consiguieron llevarse parte de este pescado grande, que se podía encontrar a unos 20 euros por kilo a primera hora de la mañana en la plaza de Lugo. No tardó en colocarse, pese a su elevado precio, y poco a poco llegaron remesas de ejemplares más pequeños con un precio tan variado como en lonja, entre los 4 euros por kilo y los 12. La media se situó en el entorno de los 8 euros, unos dos euros superior a la del resto de la semana.

Los supermercados, en cambio, registraron unos precios ligeramente superiores, con una media que osciló entre los 8 y los 10 euros por kilo. Mientras, la sardina congelada rondó los dos euros.

Los datos registrados en A Coruña fueron tendencia general en España. Así lo corroboran los datos de la Federación Nacional de Asociaciones Detallistas de Pescado (Fedepesca), que calculó que el precio medio rondó los 7,5 euros por kilo, frente a los 10 alcanzados en el San Juan de 2015 o los 12 de 2014.

"La sardina es la reina de San Juan, como el marisco en Navidad, y el consumidor paga lo que sea por ella, pero este año los precios son más asequibles, menos desorbitados", explicó el presidente de Fedepesca, Gonzalo González, que añadió que, desde hace tres o cuatro años, percibe un cambio en la "calidad" del producto, ya que antes era "espectacular" y el actual tiene "menos grasa".