España consiguió regresar este año a la clasificación de los países con las flotas más fiables y seguras del mundo. Se trata de la Lista Blanca del Memorando de París (MOU, por sus siglas en inglés), publicada recientemente, que indica la mayor o menor calidad de las flotas en función de la proporción entre las inspecciones y las detenciones de los buques de cada bandera durante los últimos tres años. Las autoridades de los países firmantes de este acuerdo (un total de 27) realizaron 64 controles a 52 buques de pabellón español en 2015 que se saldaron con dos inmovilizaciones, según datos de la Asociación de Navieros Españoles (Anave) publicados en la revista Mar del Ministerio de Empleo. Esto permitió al país mejorar las cifras del trienio anterior y volver a integrar la Lista Blanca después de caer a la Lista Gris el año pasado.

Pese a la mejoría, España se sitúa en la actualidad a la cola de ese ranking, en el puesto 41 de 43, por detrás de países como Rusia, Turquía o Panamá. Suecia lidera la clasificación de este año, con cero detenciones en los últimos tres años, seguida de Reino Unido y Francia.

La Lista Gris de este año, elaborada tras recopilar los datos de 2015 y ejercicios anteriores, que enumera los países que superan en menos de un punto los requisitos exigidos para entrar en la clasificación superior, incluye países como Polonia, Suiza, India, Lituania o Marruecos.

Mientras, en la Lista Negra de estados con más deficiencias y que suponen un mayor peligro para la navegación, Tanzania ocupa el último puesto con un exceso de 3,34 puntos, por lo que el informe del MOU de 2015 lo considera un país de "alto riesgo". Moldavia, Togo y Camboya también tienen valores altos.

Los datos del trienio 2012-2014, que se saldó con nueve detenciones tras las 194 inspecciones realizadas a buques españoles, significaron la caída de España a la lista gris después de una década en la blanca. El cambio supuso un varapalo para las navieras españolas, ya que esta degradación tiene consecuencias negativas como el aumento del número de controles o el incremento de las primas de las coberturas de seguros, según la patronal de las navieras Anave.

Los navieros esperan mantener su posición el próximo año, aunque reconocen que de momento las cifras está muy ajustadas. Las autoridades detuvieron un barco español en los 11 controles que realizaron en el primer trimestre del año, un nivel alto, ya que lo que se cuenta es el porcentaje de inmovilizaciones sobre revisiones. "La única detención de 2016 supone el 9,1% de las inspecciones recibidas. Si siguiese hasta fin de año el ritmo de 11 controles por trimestre, con solo dos retenciones estaríamos al borde de la lista gris", señalan los navieros. Pero si los controles aumenta y alcanzan los niveles de años anteriores, España tendría un margen de hasta dos inmovilizaciones más. Precisamente, el sector indica que una de las causas del empeoramiento en el trieno anterior fue la reducción del número de controles por el nuevo régimen de vigilancia del MOU.

Los países que este año inspeccionaron buques de pabellón español fueron Francia (tres controles), Portugal (3), Gibraltar (2), Alemania (1) y Bélgica (1).