Considero que no existe ninguna "región" en la UE que tenga tanta dependencia de la pesca como Galicia. La pesca es un pilar fundamental para el sostenimiento económico y social de esta comunidad. Y Galicia, que en poco más de un mes vivirá unas nuevas elecciones autonómicas, continúa sin encontrar un valedor real para ese sector que insufla vida diaria a la inmensa mayoría de las poblaciones de su litoral.

Dependemos de la pesca. Pero no parecen entenderlo así los partidos políticos, cuyas referencias al sector pesquero son tan mínimas y muchas veces carentes de base, que sus iniciativas al respecto más parecen acciones circunstanciales emanadas de la actualidad que de un conocimiento de la realidad de ese mismo sector.

Me lo decía un armador que representa oficialmente a muchos otros de toda Galicia: "Cansados de las promesas incumplidas de los partidos hasta ahora mayoritarios en Galicia (PP y PSdeG-PSOE), hemos buscado refugio en los que se denominan de izquierdas. Pero son más de lo mismo: Si no se establece un acuerdo entre ellos para defender el mar, cómo vamos implicarlos en un asunto que, o bien desconocen, o -peor todavía- no quieren conocer realmente?"

Cuando los cerqueros de Acerga y otras organizaciones pesqueras "acamparon" en las inmediaciones del edificio sede administrativa de la Xunta, en Santiago, fueron varios los alcaldes y representantes de los partidos de la izquierda que acudieron al campamento para manifestar su solidaridad y la comprensión de los motivos por los que armadores y tripulantes del cerco -también de otros artes como la volanta y artes varias- protestaban. De paso, se hicieron la "foto de familia" con los dependientes de la pesca. Dependientes, porque nadie depende más de la pesca que los pescadores, una obviedad del tamaño de un pino insigne.

Pero esos alcaldes, esos políticos -salvo honrosas excepciones- no han vuelto a dar señales de vida, de comprensión y apoyo a quienes, además de jugarse la vida en cada marea, traen vida a todos y cada uno de los puertos que conforman la más amplia red de suministro de pescado de España.

Dentro de unas semanas estaremos en la campaña para las autonómicas. Surgirán nuevas voces en los partidos que se referirán a la pesca, a los marineros, a la economía del mar, al "siempre hemos estado con vosotros"... Se celebrarán las elecciones y, gane quien gane, otra vez el silencio.

¿De verdad no lo entienden? ¿No se dan cuenta del enorme potencial -incluso de votos- que la pesca representa para Galicia? ¿No les conviene apoyarla porque es demasiado compleja o, simplemente, no logran traspasar la barrera del silencio secular que les afecta?

Somos dependientes de la pesca y Galicia no puede permitirse el lujo de perderla. Llamen a sus puertas. O mejor, simplemente, empújenlas: Están abiertas.