La lonja de A Coruña mejoró sus cifras en la campaña de la nécora este año pese a que, en términos generales, el mes de julio no dejó buenos registros en los puertos gallegos con respecto a 2015. Las subastas de este crustáceo en el muelle coruñés aumentaron un 25% durante el mes pasado, el primero desde que se abrió la veda, al pasar de 3,7 a 4,5 toneladas comercializadas, datos que colocan a A Coruña como primer punto de venta en fresco de Galicia. Mientras, las descargas cayeron un 19,4% en el cómputo global de Galicia, de 24,3 a 19,5 toneladas, y la facturación disminuyó un 13%, hasta los 331.000 euros, según datos de la Plataforma Tecnolóxica da Pesca, dependiente de la Consellería do Mar. En algunas lonjas importantes para la especie, como Ribeira o Malpica, la caída es superior al 50%.

El puerto coruñés, sin embargo, solo consiguió aumentar la facturación un 13%, de 48.500 euros a 54.900, ya que el precio medio cayó de 13,24 a 11,98 euros por kilo. Pese a ello, el sector se muestra satisfecho. "Se notó bastante la diferencia con respecto al año pasado, los barcos pescaron más, y menos mal", asegura aliviado el gerente de la firma subastadora coruñesa Angelita Villar, Carlos López, que trabaja con embarcaciones de zonas próximas como Sada, Ares y la ría de Ferrol.

En términos de recaudación, Vigo lidera un año más la campaña de la nécora con 91.400 euros facturados. La lonja viguesa, que en julio de 2015 facturó 80.000 euros, consiguió aumentar el volumen de negocio un 13,1% pese a subastar un 10,4% menos (4,2 toneladas frente a las 4,7 de 2015). Esto se debió al incremento del precio medio del kilo, que marcó 21,53 euros frente a los 17 de hace un año. Vigo y A Coruña acumulan casi el 50% de todas las descargas de nécora en Galicia.

Los datos, en cambio, no fueron positivos en el resto de puertos gallegos. Ribeira subastó 1,2 toneladas, menos de la mitad de las 2,6 comercializadas en 2015, y recaudó 19.000 euros, un 56% menos que hace un año, cuando registró un volumen de negocio de 44.000 euros. El descenso fue mayor en Malpica, que pasó de vender 1,1 toneladas el año pasado a 0,4 en 2016 y también dejó de ingresar 8.000 euros, al contabilizar 6.300 frente a los 14.400 de julio de 2015. Mientras, Cangas experimentó una caída del 28,1% en el volumen descargado, de 2,3 a 1,9 toneladas, aunque mejoró ligeramente los precios y consiguió facturar 32.000 euros (-8,7%).

De los puertos gallegos que subastaron más de una tonelada de nécora, solo Burela (una) y O Grove (1,4 toneladas) se mantuvieron en cifras similares a las de 2015.