La población de almeja babosa en el banco marisquero de As Pías -el principal en la ría de Ferrol- disminuyó un 80% desde 2011, según indica un informe del Instituto para o Control do Medio Mariño de Galicia (Intecmar) al que tuvo acceso este diario. La zona contaba, hace cinco años, con un stock de talla comercial de 223,2 toneladas, mientras que en 2016 el volumen cayó hasta las 47,6 toneladas. El sector denunció en numerosas ocasiones la "sobreexplotación" de la zona y la reducción de empleo en un banco que llegó a dar trabajo a más de 300 mariscadores.

"Estos días se incorporaron algunos más, pero en los últimos meses no había más de 35 o 40 personas trabajando allí", relata Jorge López, mariscador de la Confraría de Pescadores de Barallobre, que asegura que buena parte del sector de la ría subsiste "gracias" a las prestaciones de la Seguridad Social. "La rebaja en el número de trabajadores es lo que nos permite aguantar, si no, ya no quedaría almeja que recoger", lamenta López. La causa principal de esta situación es la contaminación, que, según los mariscadores, les obliga a "esquilmar" los bancos que permanecen abiertos a la extracción.

El informe del Intecmar, publicado el 30 de marzo, estima en 73,2 toneladas la cantidad total de bivalvos -almeja babosa, fina y japónica, así como berberecho y carneiro- de talla comercial en As Pías, un 68% menos que en 2011, cuando había 223,8 toneladas, y casi la mitad que en 2015, cuando la Xunta registró 137,6 toneladas.

La mayor parte del descenso se corresponde en ambos casos con la caída de la población de almeja babosa, especie predominante en la zona, aunque el resto de recursos también empeoraron con respecto al año pasado. En el caso de la almeja japónica, el stock cayó más de un 50%, hasta las 8,1 toneladas, frente a las 17,2 que marcaba en mayo de 2015. La fina, por su parte, se redujo de 14,8 a 7,9 toneladas, un 48% menos. La población de berberecho también cayó a la mitad, de 11,2 a 5,8 toneladas, en el último año.

La progresión de estas especies desde 2011 y 2012 -no hay datos para la japónica y el berberecho en 2011- también fue negativa, aunque muestra importantes altibajos, sobre todo en 2015, cuando el stock general se incrementó. Solo el carneiro tuvo un desarrollo positivo año tras año, ya que se elevó de 0,8 toneladas en 2012 a 3,3 en 2016, aunque es el recurso menos abundante de los listados por el Intecmar.

La cifra total de bivalvos en 2016 -73,2 toneladas- es la menor desde 2006, cuando se registraron 61 toneladas, aunque no hay datos de ese año para especies como el berberecho o la almeja japónica. Mientras, 2008 fue el peor ejercicio para la población de almeja babosa, con 32,2 toneladas, según los datos del Intecmar, que no muestran registros en los años 2007, 2009 y 2010.

Precisamente, 2011 fue el año en el que la Consellería do Mar inició el polémico sistema de reinstalación de marisco, que permite comercializar en fresco el producto de las zonas C -las más contaminadas- tras un largo proceso de depuración en bateas en mar abierto. La Xunta esgrime que este método permite compaginar los trabajos de regeneración de los bancos con la extracción de recurso, frente al sistema anterior, que consistía en paralizar la actividad para dedicarse en exclusiva a la regeneración, y que el Gobierno gallego considera "costoso e improductivo".

El sector, en cambio, califica la reinstalación de "parche" y exige a la Xunta una completa depuración de las rías para poder recuperar las poblaciones de marisco. "Seguiremos así hasta que no haya un sistema de depuración que funcione", lamenta López.