Salvamento Marítimo rescató a primera hora de la tarde de ayer a los tres tripulantes del pesquero Olisan, hundido a cuatro millas al norte de cabo Prior cuando pescaba caballa. Los marineros desplegaron la balsa salvavidas cuando se produjo el accidente y esperaron en ella la llegada de los servicios de emergencia, que constataron que se encontraban en buen estado. El puerto base del buque era Cambados y sus tres tripulantes son vecinos de la localidad coruñesa de Boiro y dos de ellos, los armadores del barco, son hermanos. Tanto Marcos G. G. (de 36 años) como Marcial G. G. (de 38) fueron trasladados en ambulancia al Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac), donde recibieron el alta a lo largo de la tarde.
El Centro Nacional de Coordinación recibió la señal de aviso del hundimiento de la radiobaliza pasadas las 14.02 horas. El centro movilizó el helicóptero de Salvamento Marítimo Helimer 209, con base en A Coruña, y el buque de rescate Salvamar Betelgeuse. El pesquero María Isabel, que se encontraba en las inmediaciones, también se desplazó hasta el lugar del accidente. La activación de la radiobaliza situaba, según las coordenadas enviadas, el punto del siniestro a cuatro millas de cabo Prior, a donde se dirigieron los equipos de rescate.
El Helimer 209 localizó la balsa salvavidas con los tres tripulantes y la embarcación Salvamar Betelgeuse procedió a su rescate. Los servicios de salvamento constataron que todos los marineros estaban ilesos y los trasladaron al muelle de Oza para que una ambulancia desplazada del 061 los atendiese. Dos de los marineros fueron llevados al Chuac como medida preventiva para descartar posibles complicaciones de su estado de salud, pero fueron dados de alta posteriormente.
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La embarcación de salvamento, durante su intervención, también retiró los objetos que quedaron a flote en la zona del siniestro para evitar riesgos en la navegación de otros barcos, según informó Salvamento Marítimo.
El barco participaba en el momento del suceso en la costera de caballa -o xarda- entre el norte de A Coruña y Asturias, pero también se dedicaba habitualmente a la captura de centollo o vieira en la ría de Arousa.
El patrón mayor de Cambados, Ruperto Costa, desconocía ayer a última hora a qué se pudo deber el naufragio. "Salvamento Marítimo es muy escueto con la información que proporciona y ellos no me responden al teléfono", explicó.
Todo apunta, sin embargo, a un golpe de mar, lo que explicaría el rápido hundimiento del pesquero y el hecho de que los pescadores no tuviesen tiempo de avisar del suceso a través de la radio VHF.
La Capitanía Marítima de Ferrol y la Comisión de Investigación de Accidentes Marítimos (Ciaim) realizarán -como suele ser habitual en estos casos- una investigación para determinar las causas del naufragio, para lo que tomarán declaración a los náufragos y analizarán las características técnicas de la embarcación, la carga y el arte de pesca.
El Olisan tiene puerto base en Cambados y entró en servicio en 1995, aunque pertenece a la sociedad Marc y Salylla, constituida en junio de 2014 y con sede en Boiro. Este pesquero, censado como buque de artes menores en el Cantábrico Noroeste y que amarra habitualmente en Rianxo, tiene 11,2 metros de eslora y casco de madera.
Este es el segundo naufragio que se produce cerca de la costa coruñesa en solo dos semanas. El pasado 16 de marzo ocho tripulantes fueron rescatados ilesos por el helicóptero Helimer 215 de una balsa salvavidas tras un incendio en la sala de máquinas de su pesquero, O Busi, a doce millas de Cedeira. En aquella ocasión, solo el patrón de la embarcación fue sometido a un chequeo médico por prevención.
