Los representantes de la asociación Long Hope, que agrupa a los exmarinos gallegos que estuvieron embarcados en Noruega entre 1948 y 1994, declaran hoy y mañana en el juzgado de Oslo para defender su derecho a cobrar las pensiones que les corresponden por los años trabajados en la marina mercante de este país.

Los 12.000 marineros españoles afectados pagaron hasta el 40% de su salario bruto en impuestos aunque al no residir en Noruega no cotizaban, por lo que no reciben una retribución. Los querellantes acusan a Oslo de violar la Carta Social Europea y el acta europea de derechos humanos y calculan que pagaron al Fisco noruego 520 millones de euros. El Ministerio de Trabajo noruego alude a que, al no residir en el país y no cotizar, no cumplen los requisitos para acceder a la pensión que reclaman.

Los marineros llevan desde el sábado en Noruega, donde ya realizaron varias concentraciones delante del Parlamento y que tienen previsto continuar a lo largo de la semana coincidiendo con la celebración juicio. La demanda fue presentada en febrero de 2016 y admitida a trámite cinco meses después tras varios recursos de Noruega para que se archivase al entender que debía resolverse por vía administrativa. Los exmarinos costean los gastos del proceso.