España fue el cuarto país del mundo con más importaciones de pescado y marisco en 2016, por detrás de Estados Unidos, Japón y China, según un informe del Departamento de Agricultura estadounidense. El estudio cifra en 6.330 millones de dólares (5.830 millones de euros) la facturación de las importaciones españolas, un 12% superior al 2015, y señala que tiene la mayor industria transformadora de productos pesqueros de la Unión Europea. Marruecos, Argentina y Francia son los países que más productos del mar venden a España.