La flota gallega no aprueba la disminución presupuestaria de la Secretaría General de Pesca, que recibirá este año del Gobierno 55,3 millones de euros -un 12% menos que el año pasado- para invertir en la mejora de las estructuras y mercados pesqueros y la protección de los recursos. "La pesca necesita apoyo político y económico, y todo lo que sea reducir no es una buena noticia para el sector", lamentó el secretario general de la asociación de armadores coruñeses de arrastre Pescagalicia-Arpega-O Barco, Torcuato Teixeira.

El principal problema para el sector pesquero radica en el impulso que Pesca está decidida a hacer de la acuicultura. "Se apuesta por la acuicultura intensiva que en Chile ya destrozó la costa porque también va en contra de los puertos y las playas", denunció el presidente de la Asociación de Armadores de Artes Menores de Galicia (Asoar-Armega), José Luis Rodríguez. La cantidad que se destina a los cultivos marinos, que el secretario general de Pesca, Alberto López-Asenjo, señaló como motor económico de la costa, son 1,8 millones de euros.

"El sector extractivo es el que genera la riqueza económica y social y el primero que se debería apoyar, porque es el que crea fundamentalmente empleo en nuestras costas", denunció Teixeira. El error en la gestión para el secretario general de Pescagalicia-Arpega-O Barco no radica en el apoyo al sector acuícola sino en que este se convierta en el foco principal.

"No es normal que se destine más presupuesto para la acuicultura y el control", denunció por su parte el presidente de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga), José Blanco, que acusó a la Administración de asegurar que escasean los recursos cuando "lo que no hay" es cuota suficiente.

El representante de la flota artesanal calificó la pesca como "fundamental" para la población del litoral y afirmó que no existe una apuesta por la sostenibilidad, la frescura y la calidad sino por la acuicultura, que va en contra del medio ambiente y el sector. José Luis Rodríguez ejemplificó el problema que puede suponer la acuicultura con la situación del cultivo de salmón en la ría de Muros e Noia e incidió en que la Consellería do Mar se negó a dar información hasta que lo denunciaron a la Fiscalía. Los informes remitidos indicaban que la mortalidad de este pez era del 82%, algo "inviable". "Es una bomba ecológica y ambiental y el Gobierno apuesta por implantar este tipo de industria", denunció Rodríguez.

El secretario general de Pesca indicó que se invertirán 15,7 millones de euros en apoyar las "necesidades de adaptación" de la capacidad pesquera, tanto paradas temporales y definitivas como reducción del esfuerzo pesquero derivado de los planes de gestión o de recuperación. "La partida para desguaces es potente y es importante que no desaparezca para las flotas sobredimensionadas o para los buques antiguos", consideró Teixeira, aunque remarcó que no es el caso de la del Cantábrico. El presidente de Asoar-Armega aseveró que esa partida se debería destinar a la construcción de barcos nuevos para que la gente joven pueda tomar el relevo. De la misma opinión es el representante del cerco. "Lo que van a conseguir es que sean otros países los que vendan aquí el pescado que consumimos en vez de promocionar el nuestro", lamentó Blanco.

Teixeira incidió en la importancia de invertir en la investigación científica, a la que Pesca prevé destinar 11 millones de euros, y lamentó que el presupuesto del Instituto Español de Oceanografía se reduzca este año, lo que dificultará que se estudie el estado de las especies para determinar de forma acertada si sea viable pescarlas. El secretario general de Pescagalicia-Arpega-O Barco recordó, en particular, la necesidad de realizar un estudio sobre la presencia de juveniles de merluza entre cabo Vilán y cabo Ortegal, donde existe una veda que impide a los arrastreros faenar entre el 1 de octubre y el 31 de enero.

"La política es destruir empleo, destrozar barcos y extender la acuicultura", resumió Rodríguez.