El Gobierno incrementará las ayudas para los tripulantes de barcos en paradas temporales para adaptarlas al Salario Mínimo Interprofesional vigente -707,7 euros al mes- y añadió que establecerá tres tramos según la duración del periodo subvencionable. Estas ayudas estaban reguladas por el real decreto 1173/2015, en vigor desde 2016 y que el Consejo de Ministros aprobó modificar ayer a petición del Ministerio de Pesca. Esta normativa indicaba que el importe del apoyo económico a los pescadores se calculaba al multiplicar un máximo de 45 euros por los días de parada.
Los armadores también se beneficiarán de los cambios en la normativa, que según Pesca, facilitará el cumplimiento de los requisitos para recibir la subvención por la parada temporal -no se consideran como tal las realizadas por razones de seguridad-. El nuevo reglamento reconoce excepciones en las condiciones que debía cumplir un buque, obligado a permanecer inmóvil en puerto y a tener el dispositivo de seguimiento de ruta vía satélite (VMS) encendido mientras estaba paralizado. Los arrastreros y cerqueros ya no tendrán que mantener operativa la conocida como "caja azul" todo el tiempo para recibir las subvenciones, un condicionante que según los armadores supuso el rechazo de expedientes en muchas autonomías porque hacía "inviable" cumplir los requisitos exigidos.
El Ministerio de Pesca destacó que la nueva regulación también suprime la limitación que impedía a los familiares de primer y segundo grado del beneficiario de las ayudas registrar nuevos barcos tras una paralización definitiva -que implica el desguace de la embarcación- de cinco años.
Las comunidades autónomas podrán, según lo acordado por el Gobierno ayer, gestionar y financiar las subvenciones a las paradas temporales y definitivas de la flota que no se dedique en exclusiva ni al marisqueo ni a faenar en aguas interiores. Esta medida pretende "optimizar" el presupuesto disponible de las autonomías y de la propia Unión Europea -se desarrollan en el marco del reglamento del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP)- para que el aprovechamiento de las ayudas sea óptimo.
El Gobierno aseguró que la modificación del real decreto era necesaria para garantizar una "aplicación eficaz y equitativa" entre sus posibles destinatarios para evitar desigualdades. Las ayudas persiguen potenciar la rentabilidad económica de la flota y garantizar la explotación de los recursos marinos para que puedan aprovecharse sin poner en riesgo las poblaciones ni el medio, con lo que se promueve su sostenibilidad. Precisamente, el secretario general de Pesca, Alberto López-Asenjo, anunció a finales de abril que se destinarán 15,7 millones de euros a apoyar las "necesidades de adaptación" de la capacidad pesquera, entre las que se incluyen las paradas.
El Ministerio informó que alguna de las modificaciones aprobadas se aplicarán con carácter retroactivo al 31 de diciembre de 2015, aunque no concretó cuáles.
