Los españoles redujeron el consumo de productos pesqueros en los hogares un 3,8% entre junio de 2016 y julio de 2017 hasta los 1.095,4 millones de kilos, según los datos del Panel de Consumo Alimentario en los Hogares del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. El gasto ascendió a 8.906 millones de euros, un 0,5% menos. Sin embargo, en julio, la demanda aumentó ligeramente (0,8%) respecto al mismo mes del año pasado, mientras que la inversión se incrementó (5%) por la subida de los precios.

El consumo de pescado y marisco por persona fue de 24,9 kilos entre junio del año pasado y julio de 2017. La compra de productos del mar descendió un 5,3% en las categorías de marisco, moluscos y crustáceos; un 4,2% en la de pescados frescos y un 5,6% en los congelados, mientras que las conservas aumentaron un 0,9%. El gasto se redujo un 1,8% en mariscos, moluscos y crustáceos; un 1,5% en pescados frescos, y un 2% en los congelados y subió un 4,1% en las conservas.

Los productos que aumentaron fueron el bacalao, la dorada y el mejillón, mientras que se redujeron los atunes y bonito, la caballa fresca, el salmón y la merluza y pescadilla.