La patronal conservera Anfaco-Cecopesca negó ayer que exista una situación de "fraude en el sector" tras la alarma generada por la intoxicación de 154 personas por la ingesta de atún en mal estado. 105 de los casos están relacionados con la empresa almeriense Garciden.

La patronal alega que, según las noticias publicadas, el episodio "parece haberse limitado" un grupo reducido de operadores que "habrían hecho" un manejo irresponsable de ciertos aditivos para darle al producto apariencia de fresco cuando en realidad había sido previamente congelado. "La conserva fue completamente ajena a este suceso y las condiciones higiénico-sanitarias están perfectamente garantizadas respecto a tal producto", alega Anfaco-Cecopesca en un comunicado, en el que defiende que se informó en todo momento sobre el asunto y que estuvo en contacto con las empresas.