El buque gallego fue retenido hace hoy 21 días y uno menos es los que lleva amarrado en el puerto de Comodoro Rivadavia, en la provincia de Chubut. Los primeros días el capitán, de Ribeira, tuvo que declarar en comisaria, pero el resto del tiempo tanto él como el resto de la tripulación tuvieron libertad de movimiento. Fuentes de la armadora indicaron que los 34 tripulantes (trece gallegos, uno de Ondarroa y el resto de Perú e Indonesia) se encontraban bien desde el primer momento y que habían podido hablar con sus familiares. Los marineros tenían plena libertad de movimiento, puesto que lo que se encontraba bajo arresto era el barco, el Playa Pesmar Uno.

El cónsul español en la ciudad argentina de Bahía Blanca, Carlos Tercero, visitó a la tripulación, que estuvo "atendida en todo momento", según Pesquerías Marinenses. Los marineros no ven la hora de regresar a aguas internacionales para volver a trabajar.