El alcalde de Oleiros asegura que "grupos de gitanos" han ocupado algunas de las viviendas en Nós que están abandonadas tras ser expropiadas por el Ministerio de Fomento para ampliar la carretera Nacional VI. Ángel García Seoane considera que el Ministerio de Fomento tiene que "tomar una solución urgente para demoler ya estas casas" porque la situación retrasa el inicio de las obras.

García Seoane afirmó, en declaraciones ayer a Radio Coruña, que existen "determinados elementos que quieren crear guetos". Agregó que propietarios que "cobraron la casa, que le vendieron a Fomento, ahora meten ahí a familias" de esta etnia que no tienen una vivienda. "La solución no es ésa", agregó.

La actuación que prevé ejecutar el Ministerio de Fomento en Oleiros es la ampliación y mejora de la seguridad vial en la carretera N-VI: se duplicará el número de carriles además de construir varias rotondas.

La mayor parte de las viviendas afectadas por estas obras, y que ya fueron expropiadas por Fomento, ya fueron desalojadas por sus inquilinos. En la parroquia de Nós, en la zona de Batán y A Fortaleza, los vecinos desocuparon sus casas, situadas al borde de la carretera N-VI, entre julio y septiembre del año pasado.

El siguiente paso es el derribo de estas edificaciones que impiden la ampliación de la calzada. En total se demolerán 72 viviendas en Oleiros para ejecutar esta actuación.

Demarcación de Carreteras confirmó ayer que el derribo de las casas está paralizado debido a que aún falta un trámite por realizar. En esta actuación surgió un problema: cuatro de las casas que es necesario derribar para ampliar la carretera estaban protegidas, incluidas en el catálogo del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) por su interés histórico artístico y arquitectónico.

Aprobación definitiva

El pleno de Oleiros acordó en abril de 2009 aprobar inicialmente la modificación puntual del PXOM para descatalogar estas viviendas, eliminar su protección para que pudiesen ser derribadas.

La Consellería de Medio Ambiente resolvió en julio del año pasado que dicha descatalogación no era necesario someterla al trámite de evaluación ambiental estratégica a pesar de que una de estas viviendas, la finca Os Madroños en A Fortaleza, tenía protección integral en el plan general dado su valor. Las otras tres casas afectadas, ya incluidas en el catálogo del plan urbano anterior, el de de 1995, no tenían un nivel de protección tal elevado).

En la tramitación de la descatalogación aún falta la aprobación definitiva por parte del Ayuntamiento de Oleiros (la inicial fue en abril de 2009), un paso necesario para que Fomento inicie los derribos.