La dirección del Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Portofaro, ubicado en la parroquia cambresa de O Temple, amenaza con dimitir en bloque si la Consellería de Educación no da marcha atrás en su decisión de reducir la plantilla docente.

La Xunta, antes de que comenzara el curso, ordenó que uno de los profesores de inglés con los que contaba el colegio a tiempo completo empezara a dar clases también en el Montel Touzet de A Coruña, por lo que su dedicación se reducía en Cambre a 15 horas semanales. Ayer, con las clases iniciadas, Educación decidió que este docente también trabaje en el Raquel Caamacho (A Coruña), por lo que el Portofaro tendrá que rehacer sus horarios ya que sólo podrá disponer de él 12 horas a la semana.

El director del centro cambrés, Jaime López Lisnier, explica que el colegio ha sido uno de los elegidos para desarrollar el proyecto Abalar -para integrar las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) en el sistema educativo-, pero que no podrán llevarlo a cabo ya que el encargado de coordinarlo tendrá que asumir ahora las horas de clase de inglés que deja al descubierto este cambio. "Nos obligaron a invertir 3.000 euros para adaptar las aulas a las nuevas tecnologías y ahora no vamos a poder realizarlo; visten un santo pero desvisten otro", reprueba Lisnier.

Además, el número de matrículas en este centro de enseñanza no se ha reducido con respecto al año pasado, sino que se mantiene en el mismo nivel con alrededor de 470 alumnos.

En respuesta a la orden autonómica, la directiva del colegio remitió una reclamación al director xeral de Educación, José Luis Mira Lema, para que deje sin efecto esta última decisión. De no hacerlo, todos sus miembros aseveran que dimitirán de su cargo. La Consellería replicó tras conocer la noticia que "las horas de inglés de los alumnos están cubiertas".

El alcalde de Cambre, Antonio Varela Saavedra, lamentó ayer que la directiva "de un centro de referencia" tenga que llegar a esta situación por una reducción en las horas de trabajo de los profesores necesarios para mantener la oferta educativa. Varela solicita a la Xunta que reconsidere su decisión y haga posible que el Portofaro mantenga su cuadro de profesorado.