Un lago con una vasta superficie de ochocientas hectáreas, mucho pero que mucho espacio para utilizar y recuperar para los vecinos de As Pontes. Hacen falta ideas y parece que pueden llegar de la Universidade da Coruña. Cada año, los estudiantes de Arquitectura han de desarrollar proyectos reales sobre un tema común. En esta ocasión, la gran masa artificial de agua pontesa, creada por Endesa sobre la mina de carbón clausurada hace más de dos años, será la protagonista de los trabajos universitarios.

Los futuros arquitectos tendrán que devanarse los sesos para encontrar ideas originales para el desarrollo urbanístico entorno al lago, cuyo relleno de agua estará listo el próximo año, según las previsiones de Endesa. La recuperación ambiental de la zona es el objetivo que tendrán que tener en mente los alumnos de la Escuela de Arquitectura coruñesa para sus proyectos.

Los doscientos estudiantes que participarán en la iniciativa se desplazaron hasta el Concello de As Pontes para conocer de primera mano la zona. En los proyectos de los arquitectos en potencia, habrá estudios paisajísticos y de emplazamiento para un mirador-observador de aves, además de un aula de la naturaleza. También está previsto un centro de interpretación de energía y la recuperación de una instalación ambiental.

El alcalde pontés, Valentín González, recibió esta semana al alumnado y al director de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidade da Coruña, Xosé Manuel Casabella, para firmar el convenio por el que el estudiantado aportará sus frescas ideas.

Los análisis y diseños de los alumnos formarán parte del trabajo para desarrollar urbanísticamente el entorno, aunque el Concello aclara que el convenio no implica que las creaciones vayan a materializarse. Una publicación recogerá las propuestas de los jóvenes para el lago artificial. Entre ellos, estarán también estudiantes franceses y alemanes, que actualmente disfrutan de una beca Erasmus en A Coruña.

Mientras los ecologistas critican el proyecto porque va a suponer la muerte definitiva del río Eume por el trasvase de agua hasta el lago, el BNG pidió este verano un pleno para debatir sobre los usos del lago artificial, que estará lleno en 2011 pero que, según recuerdan los nacionalistas que aseveró el alcalde, sus aguas no se podrán usar hasta 2020. La formación frentista explica que no haría falta esperar toda esta década para definir qué se quiere hacer con él.