El Plan General de Ordenación Municipal de Arteixo (PGOM), en fase de redacción, reserva unas trece hectáreas de suelo al noroeste del polígono industrial de Sabón para la ampliación de éste y la creación de una nueva zona "de actividades económicas".
Según se recoge en el anteproyecto del documento, elaborado por Arnaiz Consultores SL y Tinsa por encargo del Ayuntamiento, el ámbito, que colinda con el parque empresarial, permitirá obtener alrededor de 50.000 metros cuadrados edificables.
Las trece hectáreas conforman la única bolsa de suelo industrial propuesta en el nuevo anteproyecto del PGOM, una superficie que se une al suelo industrial ya previsto en el plan urbanístico vigente y al del polígono industrial de Morás, de carácter supramunicipal.
El total de hectáreas reservadas a usos productivos en el nuevo planeamiento es así de 183, de las cuales 150 pertenecen a la primera fase del parque empresarial de Morás, veinte al ámbito industrial ya recogido en el anterior plan general en Meicende, en las inmediaciones del polígono de La Artística, y las tres hectáreas restantes son las situadas al noroeste de Sabón.
El anteproyecto del PGOM se encuentra en exposición pública y el BNG ya ha manifestado, a través de sus alegaciones, que se opone a esta nueva reserva de suelo para "actividades económicas".
"No parece adecuado el crecimiento industrial propuesto en el polígono de Sabón, ya que carece de un análisis de la situación y no se identifican las consecuencias sobre el medio ni la zona residencial", recogen los nacionalistas en sus reclamaciones.
La formación frentista advierte, además, de que la ampliación de Sabón "incrementaría la presión industrial sobre las zonas habitadas de Figueroa, Rañal, Pedreira y Catuxa" y de que agravaría el "caos" circulatorio en el polígono.
Para el Bloque, el anteproyecto del plan general "insiste" en un tipo de desarrollo que ya es el que tiene ahora Arteixo y el que ha provocado "una situación urbanística bastante caótica, con un crecimiento alrededor de las vías de comunicación, muy saturadas". Añade que la convivencia entre usos industriales y urbanos acompañó al municipio en su historia más reciente pero que ésta no respetó el medio natural, por lo que la mayor parte de la población se concentra en el centro y norte del ayuntamiento y soporta "una urbanización muy deficiente, falta de espacios libres, un intenso tráfico rodado y contaminación acústica".
