Desde que Alba Carrillo saliese de 'Supervivientes' no han cesado las polémicas. La primera, el enfrentamiento con Fonsi Nieto por la presencia de su hijo en las instalaciones de Telecinco durante la última gala del reality, ahora un nuevo enfrentamiento con la que fuese su abogada y gran defensora, Teresa Bueyes.

Desde que saltase la noticia del divorcio de Alba Carrillo y Feliciano López, la letrada se convirtió en su sombra, portavoz y gran defensora, recorriéndose todos los platós de televisión desde hace más de un año. Pero la relación se ha enfriado desde que llegase de Honduras, reconociendo la abogada que Alba no le contestaba al teléfono.

Desde 'El Programa de Ana Rosa', Paloma García Pelayo ha anunciado que este distanciamiento podría deberse a que a Alba no le haría especial gracia la continua presencia de su abogada en los platós de televisión, sumado a que Teresa Bueyes culpabiliza a Lucía Pariente de la presencia del menor en las instalaciones de Mediaset, planteándose incluso la posibilidad de prescindir de sus servicios.

Ante la información, Teresa ha entrado por teléfono para anunciar en exclusiva que renuncia a la defensa de Alba Carrillo. "No me compensa defenderla bajo ningún concepto", ha confesado, alegando que ella únicamente cobra sus honorarios por la representación legal y que ambas compartes representante artística. "No he conseguido hablar con ella, no he podido verla y en el momento en el que se está tocando mi imagen pública, renuncio a llevar todas las cuestiones legales que Alba tiene abiertas", ha explicado Teresa, visiblemente enfadada, aunque asegura que adora a Alba y que toma esta decisión por el bien de su amistad.

Además, Teresa ha negado haber cobrado ningún porcentaje por la representación artística de Alba, simplemente le asesoró legalmente sobre lo que podía hablar y lo que no en su polémica entrevista en 'Sálvame Deluxe': "El acuerdo era que me llevase un 10% de honorarios pero por el asesoramiento legal por las horas que le había dedicado, no por representación".

Una decisión que pillaría a Alba Carrillo por sorpresa, dejándola sin defensa en sus causas legales abiertas, como es la demanda de divorcio contra Feliciano López o la continua batalla legal con Fonsi Nieto, que en septiembre podría plantearse pedir la custodia de su hijo en común.