La halterófila española Lydia Valentín se ha colgado la medalla de bronce en la categoría de -75 kilos en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, cuarta presea para España en la ciudad brasileña tras los éxitos de la nadadora Mireia Belmonte y la kayakista Maialen Chourraut.

Lydia Valentín aseguró que esa presea le "sabe a oro" porque hace unos meses "no sabía si iba a estar compitiendo" en la ciudad brasileña.

La leonesa, dos veces campeona de Europa, indicó en zona mixta que si hubiera estado en sus mejores marcas "hubiera sido segunda", aunque apuntó que esta medalla, la primera que la halterofilia española consigue en unos Juegos Olímpicos, le "sabe a oro".

Quinta en Pekín 2008 y cuarta en Londres 2012 -donde las tres medallistas dieron positivo y podría llevarse el oro-, Valentín confirmó su primera medalla olímpica en una prueba dominada por la norcoreana Jong Sim Ring, que se colgó el oro, mientras que la plata fue para la bielorrusa Darya Naumava.

La leonesa, de 31 años, no pudo igualar los registros de Rim Jong Sim, quien dominó la categoría con un total de 274 kilos, ni de la bielorrusa Darya Naumava (258), pero rubricó una jornada histórica para la halterofilia española con la consecución de la medalla de bronce, la primera que el país consigue en esta disciplina en unos Juegos Olímpicos.

El bronce de Lydia Valentín se suma al oro logrado por la palista Maialen Chourraut en el K1 de eslalon en aguas bravas y el oro y el bronce que la nadadora Mireia Belmonte ganó en los 200 mariposa y 400 estilos, respectivamente.

Lydia Valentín, que fue quinta en Pekín 2008 y cuarta en Londres 2012, aseguró el primer intento en la modalidad de arrancada, con 112 kilos. Después, falló con 116 en la segunda rotación aunque acabó alzando este peso en la tercera y última.

Acomodada en la segunda posición a falta de la disputa de la modalidad de dos tiempos, Lydia Valentín caminó con determinación hacia la certificación de su plaza en el podio.

Hasta un total olímpico de 257 kilos

En sus tres últimas apariciones en el Pabellón 2 de Riocentro, levantó consecutivamente 135, 138 y 141 kilos, lo que le aseguró la obtención del bronce con un total olímpico de 257 kilos.

Con uno más, 258, cerró la competición la bielorrusa Darya Naumava, segunda.

La gloria en la categoría femenina de 75 kilogramos fue para la norcoreana Rim Jong-Sim, quien se proclamó campeona con un total de 274, repartidos en 121 kilos en arrancada y 153 en dos tiempos.

Este resultado ratificó la superioridad de una levantadora que hace cuatro años, en Londres, ya se había impuesto en la categoría de 69 kilogramos. Ninguna mujer había logrado antes ganar en dos categorías distintas.

La levantadora de Pyongyang, de 23 años, es además la primera deportista de su país que gana dos oros en los Juegos Olímpicos.