La selección española femenina de baloncesto abrumó ayer a la de Serbia con una pétrea defensa, la batió con claridad en la semifinal olímpica por 68-54 y se aseguró la plata en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

Gran éxito del baloncesto femenino español, que suma esta medalla a las tres que consiguió la selección masculina en Los Ángeles 1984, Pekín 2008 y Londres 2012.

El partido realizado por las de Lucas Mondelo rondó, y más tratándose de una cita de este nivel y esta exigencia, la perfección. Inexpugnable en defensa para unas serbias que sufrieron lo indecible para anotar y sobrevivieron gracias a una suplente Sasa Cado (12).

Y también al otro lado del campo, en ataque, estuvo colosal Laura Nicholls (13 puntos, 12 rebotes, 3 tapones y 23 de valoración), a la que fueron acompañando a lo largo del partido Astou Ndour (14), Silvia Domínguez (10) y Alba Torrens (14), la estrella del equipo español, que fue la que cerró el choque al inicio del último cuarto.

Ahora España afronta un reto casi imposible, pero ya logró a por lo que venía a Río, a por una medalla. Y, como poco, será de plata.