Vivimos este año el quinto centenario de la santa de Ávila, patrona de los periodistas españoles porque escribió cantidad. Hoy 15 de octubre es además su fiesta. Para homenajearla reviví los capítulos de la vida de Santa Teresa que hizo Josefina Molina para TVE dirigiendo a Concha Velasco. Memorable serie. Me sonreí cuando advertí que bautizaban como Camino de perfección, título de una de las obras de la santa, al certamen internacional de escuelas de circo celebrado este verano en Ávila, pues no en vano los aprendices de saltimbanquís buscan la perfección en sus cabriolas. De Sta. Teresa de Jesús es la afirmación cierta de que a Dios se le encuentra también entre los pucheros. Entre las perolas, intercalo yo, para validar una pregunta que me desconcertó: -¿Verdad que María perolea muy bien? Luis quería expresar que la dueña del restaurante cocinaba estupendamente. Cierto, Luis, a ver si lo repetimos. Además en honor de la insigne abulense me leí una breve biografía de una sus hijas espirituales, santa Edith Stein, judía de raza, filósofa, mística y mártir carmelita gaseada en Auschwitz en 1942. Impactante. Apretadamente termino felicitando a varias Teresas: a una eficaz empresaria e ilusionada abuela, a la mejor experta en cine, a mi prima Tere, a una Teresiña que empezó el cole, y a tantas Teresas más, felicidades.