Alvedro y las ayudas a la navegación

Las formidables estadísticas de Alvedro, pese a las guadañas de la titular de Fomento y de la Xunta de Galicia, poco o nada interesadas en que se completen las ayudas a la navegación, nos indican (las estadísticas) que nuestra estación aérea debería contar con mayor número de destinos nacionales y no estar sujeta a restricciones internacionales. La promesa municipal de que Air Europa e Iberia mantendrán, por interés propio, sus escalas en La Coruña constituirá un éxito de la gestión municipal, si de las bienandanzas pasamos a confirmarlo con hechos. Alvedro es, para nuestra ciudad, un generador de rentas y un medio imprescindible para su desarrollo económico-social. El dato consignado, en cuanto a mantenimiento de escalas aéreas, es un signo positivo dentro del balance poco halagüeño que registran los ayuntamientos podemitas en nuestra región. Se da la paradoja de que las mayores críticas las formulan quienes comparten su coalición y, de manera protésica, los mantienen en sus poltronas. Ponerse de perfil es un postureo consustancial con los socialistas. La trasparencia informativa no es el fuerte de los neófitos municipios, transparencia necesaria para sortear el caciquismo posmoderno en el que, unos pocos o uno solo, saben más que el resto. Todavía no han calibrado el sentido de las últimas elecciones: no representar más de lo mismo. Es decir, evitar nuevos pasos al desdoro de la política, como esencia del interés general. Hay que espigar en las aspiraciones del ciudadano y tratar de complacerlas. Tengan en cuenta que el desarrollo de La Coruña depende más de la voluntad de los vecinos que de los artificios municipales.