El cloroformo y la tubería de aguas pluviales

La acción municipal de nuestro Ayuntamiento, pese a la intensidad política que lo caracteriza o tal vez por eso, descansa, según veremos, en cierto desbarajuste. Don Xulio no es un hombre fácil para la negociación, discordante con asuntos que no ha hecho suyos, lleva, en ocasiones, a la beligerancia, receta negada para acercar posiciones y sostener compromisos. La aprobación de los presupuestos municipales es un ejemplo de rémoras, que se añade a la frustrada Temporada Lírica, al Festival de Mozart, sin recuperar tras haber sido entregado por el anterior alcalde al Centro de Difusión Nacional, etc., evidencian cómo la Cultura no puede ser utilizada como herramienta ideológica porque corrompe los ideales de la cultura misma. La poesía no se puede reemplazar por la regueifa, ni el do de pecho por el bravo aturuxo. Hemos entrado en una mala costumbre, en la que pretenden corregirnos los que más tienen que aprender, en lugar de esforzarse en explorar otras áreas del conocimiento, como sugiere y exige el mundo circundante. Llama la atención, incluso nos parece caprichoso que, por falta de "certezas técnicas" (rematar una tubería de aguas pluviales, LA OPINIÓN 29-01-16) se mantenga cerrado el túnel del Parrote, para incomodidad de los vecinos y disgusto de comerciantes. Este es un ejemplo del sueño particularista municipal que, como todos los sueños, acabará yéndose por el arrequive. Nos gustaría que, para superar la mortecina representatividad edilicia, contásemos con líderes imaginativos, en vez de partidarios del cloroformo.