La plaza de Lugo, de La Coruña, se ha convertido en el centro de creatividad de nuestra moda y, en la zona, donde mejor se refleja el gusto por la vida de los coruñeses. Conviene recordar que pocas ciudades como la nuestra conservan una tradición milenaria en la industria textil, tradición que se ha mantenido y que, en la actualidad, ha hecho eclosión internacional con la multinacional Inditex, que defiende el prestigio de Galicia en los cinco continentes. Su marca emblemática Zara está en vísperas de inaugurar en el perímetro de la plaza de Lugo un grandioso establecimiento que otorgará fuerza y potencial al ramo textil y al de la creación. Hay otras firmas relevantes asentadas en La Coruña, cuyos apreciados diseños salen de las factorías del cinturón industrial. A estas alturas, resulta llamativo que nuestra ciudad no haya presentado su candidatura a la sede de la Semana de la Moda. Por su foco fabril, su pragmatismo empresarial y atmósfera ilustrada, pocas urbes poseen como La Coruña esa aristocracia innata propicia para que el envoltorio del glamour excite el negocio de la seducción y la moda, evidencias de un potencial económico y cultural. Es un reto que debiera acometerse con decisión y exigencias razonables. Sería lamentable que algunos políticos considerasen la moda elitista cosa de ricos.
Otrosidigo
Cuentan que en cierta ocasión pidieron a Giorgio Armani un resumen o síntesis de la moda; "un escaparate de Zara", respondió.
