Así de contundente se expreso el presidente del gobierno, don Mariano Rajoy, en una entrevista, que le hicieron en una emisora de radio de ámbito nacional, cuando le realizaron una pregunta sobre el disparatado precio de la luz en nuestro país: "Eso se resuelve con que haga viento y llueva".

Cuando uno escucha semejantes contestaciones de un presidente del Gobierno, resulta obligado que me tenga que hacer la pregunta de si vivo en un país serio y con responsables políticos que se interesan por los problemas de los ciudadanos, o si estoy en un país donde gobiernan los mediocres, los que no saben nada o no se acuerdan de las cosas y situaciones que vieron pasar por delante de sus morros. Me parece una verdadera tomadura de pelo a los españoles, que en muchos casos se verán y se las pasarán muy negras para llegar a fin de mes, y máxime cuando tengan que pagar el recibo de la luz que les va a llegar. Vamos, como para que el señor Rajoy, que vive en La Moncloa y no paga los recibos de la luz, vaya de gracioso, sarcástico, irónico, además de pretender tomarnos por tontos al resto de los españoles, contestando de esa manera a una cuestión y problema muy preocupante para la inmensa mayoría de los ciudadanos.

En cualquier caso, no me extraña su contestación de chamán, ya que no es partidario de ninguna otra política alternativa a la producción de energía eléctrica, que no sea las que ya están en manos de los grandes monopolios de España, las empresas de energía eléctrica hidráulica y de carburantes fósiles.

Prueba de lo anterior, es la postura del Partido Popular, ante la proposición de ley, presentada y apoyada por todos los partidos políticos con representación en el Congreso, a excepción del partido que dirige y controla el señor Rajoy. Dicha proposición pretende que se establezcan medidas que tiendan a fomentar el autoconsumo eléctrico, y derogar el real decreto del Gobierno del PP del año 2015, estableciendo lo que se vino a denominar "impuesto al sol". La energía autoconsumida estará exenta de todo tipo de cargas y peajes, y los excedentes de las instalaciones de generación asociadas al autoconsumo estarán sometidos al mismo tratamiento que la energía producida por el resto de las instalaciones de producción. El argumento expuesto por el ministro de industria para oponerse a la proposición de ley es que "se reduciría las recaudación del IVA". ¿Cuánto más IVA se recaudaría por la venta de los elementos necesarios para producir para el propio autoconsumo la energía eléctrica necesaria?, como paneles, baterías etc., etc.

Esta posición del Partido Popular no es nueva, ya a principios de 2012, el Gobierno español, (Rajoy presidente), aprobó el RDL, por el que se paralizó la instalación de nuevas centrales fotovoltaicas y demás energías renovables.

¿Tendrá algo que ver, esta posición totalmente obstruccionista al desarrollo de fuentes de energía renovables, que no emiten ningún tipo de polución durante su funcionamiento y que contribuyen a evitar la emisión de gases de efecto invernadero, con la utilización con demasiada frecuencia de las puertas giratorias de determinados políticos que han recalado en las empresas hidroeléctricas con unos sueldos que nada tienen que ver con el salario mínimo?

Gracias, señor Rajoy, por ayudarnos a que nos envenenemos.