Conocen la Teoría Cinética de los Gases? Se trata de una apasionante construcción teórica que trata de explicar el comportamiento de un sistema gaseoso aislado, atendiendo fundamentalmente a la velocidad y posición de todas y cada una de las moléculas del gas. Como se pueden imaginar, es un tipo de proceso físico de esos que se denominan de n cuerpos, donde n es un número verdaderamente grande. Un enfoque de tipo micro.

Hoy en día, con el adelanto tecnológico que ha supuesto la irrupción en nuestras vidas de los grandes ordenadores, se pueden hacer simulaciones a partir de la resolución del enorme conjunto de ecuaciones diferenciales que caracterizan tales posición y movimiento de la molécula. En la antigüedad las cosas eran mucho más complicadas pero, aún así, la comunidad científica progresó en su conocimiento de este tipo de situaciones.

La Termodinámica, en cambio, utiliza las variables macroscópicas del conjunto de esas moléculas del gas (temperatura, presión, volumen, cantidad de materia...) para llegar a los mismos resultados desde una perspectiva macro. Aquí ya no importa dónde está cada molécula, o cómo se mueve, sino lo que tiene que ver con el conjunto del gas.

Obviamente, la realidad es la misma la estudiemos desde lo macro o desde lo micro. Lo primero es un abordaje global, atendiendo a lo común de los elementos íntimos que forman el sistema estudiado, y lo segundo, estadístico, entrando a trabajar con las coordenadas y vectores propios de cada uno de esos elementos. Una doble posibilidad muy presente siempre en las disciplinas que tratan de modelizar y explicar qué ocurre con la realidad, sea esta la natural o la construida por las personas.

La Economía, siempre apasionante, abunda en este análisis ambivalente, macro y micro. Lo macro, en términos agregados, explica con "cuasivariables de estado" la dinámica de los sistemas. PIB, Renta Disponible, Renta Nacional y otros conceptos fluyen para contar qué tal nos va todo y por qué. Lo micro, la Microeconomía, hace una aproximación a la realidad mucho más apegada al terreno. ¿Qué les pasa a las empresas? ¿Y a los particulares? ¿Hay creación de actividad económica? ¿Se hunde el consumo familiar? Por sectores, ¿cómo están evolucionando las diferentes empresas en los distintos territorios? Una y otra, evidentemente, deberían explicar la misma realidad desde perspectivas diferentes, pero llegando a las mismas conclusiones. Obviamente con matices, obtenidos fruto de una u otra metodología, pero guiándonos a un mismo núcleo duro de conclusiones.

Les cuento todo esto porque, en esta realidad multipolar en la que nos encontramos, parece que esto no fuese así. Ves los indicadores macroeconómicos y nos cuentan una cosa. Y, sin embargo, te topas de bruces con la realidad, y lees entre líneas otra. Y una y otra aproximación no acaban de casar. ¿Por qué? Aparte de las visiones interesadas en uno y otro sentido para que las cosas se perciban de una forma u otra, ¿qué nos está pasando?

Lo macro plantea un cuadro de mando en el que los números van bastante bien, y lo micro no acaba de despegar. El desempleo sigue siendo inaceptable, y el miedo, tan apegado a la génesis de la cíclica recesión en la economía de mercado, está muy presente en nuestra sociedad a pesar de que ahora ya salgamos un poco más de vacaciones. ¿Macro y micro están divorciados? ¿O es solo cuestión de la inercia en la dinámica de lo pequeño, que ya se está evidenciando en los trazos gruesos de las tendencias macro? ¿O es que el despegue de lo macro se ha sustentado en una mucho más notable concentración de la riqueza, y eso justifica los números globales a pesar de lo magro de la evolución de la realidad micro para los más?

Porque lo que no acepto, queridos lectores, es que la realidad macro y micro, si están bien fundamentadas y entendidas, nos digan cosas dispares. Eso ni es científico, ni lleva a alguna parte...

Cuídenseme... Y sigan disfrutando de esta recién estrenada primavera...