El Ayuntamiento de A Coruña logró este pasado lunes en segunda convocatoria la concesión de quince millones de los fondos europeos Eidus que impulsan proyectos de medio ambiente, movilidad, infraestructuras e integración social en las ciudades comunitarias. Pese a que esta línea de financiación es aportada por Bruselas, corresponde al Ministerio de Hacienda la evaluación de los proyectos presentados y el reparto del dinero concedido a los planes seleccionados.

La partida conseguida por A Coruña es la máxima cuantía que se podía obtener en este tipo de ayudas y representa cerca del 50% de los 35 millones que los fondos Eidus estipulaban para Galicia en esta segunda convocatoria. Los 15 millones que percibirá la ciudad coruñesa igualan la cantidad concedida a Vigo en la primera fase, en la que Santiago y Pontevedra habían logrado también 10 millones y Culleredo 3,5. Ferrol, con 10 millones y Arteixo, con 5, logrados también en esta segunda fase, completan el mapa de inversiones Eidus en Galicia hasta el año 2023. El Concello arteixán destinará la partida a la creación de una nueva línea de autobús y a ampliar paseos fluviales y carriles bici.

Los proyectos presentados por municipios del área coruñesa han obtenido en conjunto entre ambas convocatorias 23,5 millones, que se elevan a 43,5 en el ámbito de la provincia.

El alcalde, Xulio Ferreiro, considera que las 22 líneas que conforman globalmente el proyecto presentado por A Coruña, pactado con la oposición, permitirán poner en pie un nuevo modelo de ciudad más humanizada.

Este era el segundo intento municipal para acceder a este reparto comunitario, después de quedarse fuera en octubre del año pasado de la primera fase al obtener menos puntuación que otros concellos y tener que reformular la presentación del proyecto. La propuesta pactada contó con la colaboración y la ratificación en el pleno de la oposición.

Para poder obtener los fondos europeos, el Concello coruñés tuvo que elaborar, tal y como demandaban las bases, una estrategia de Desarrollo Urbano y Sostenible (DUSI), para ejecutar entre los años 2017 y 2023. Contrató para ello, en esta segunda fase, a la empresa que había participado en la elaboración del plan que consiguió los fondos Urbana C para el Agra do Orzán, cuyo fruto más visible es el centro Ágora.

Para este periodo de ocho años, diseñaron 34 actuaciones. Se solicitó subvención para 22 de ellas, con un presupuesto total de 18,5 millones, a financiar entre la UE (15 millones) y el erario municipal (3,5). Las actuaciones están agrupadas en cuatro objetivos temáticos: mejorar la participación social a través de las tecnologías de la comunicación y la información (TIC), la movilidad sostenible, la mejora de espacios públicos, medio ambiente y patrimonio y la atención a áreas desfavorecidas y personas en riesgo de exclusión social.

En cuanto a la movilidad, hay reservados 1,9 millones para fomentar los desplazamientos peatonales; 250.000 para fomentar los caminos seguros para escolares y para mayores; y 1,6 millones para la red ciclable existente y la intermodalidad bici-transporte público, en donde la nueva estación intermodal es considerada clave. Con 250.000 euros prevén modernizar las marquesinas de los buses, con 400.000 buscan reducir la contaminación lumínica y con 800.000 euros los edificios públicos funcionarían con energías renovables.

Cinco son las actuaciones para espacios públicos y medio ambiente. El primer eje (450.000) servirá para recuperar enclaves de costa, fuentes, lavaderos y cursos fluviales. Un total de 1,35 millones de euros están pensados para regeneración de patrimonio natural y cultural en espacios de interés local o degradados (eliminar especies invasoras y plantación de autóctonas, restos arqueológicos, sendas tradicionales...). Una tercera línea de 2,65 se centra en recuperar calles peatonales y plazas con mobiliario urbano, zonas de sombra, áreas de juego...; 250.000 euros son para huertos urbanos y otro millón para la humanización de los espacios públicos de los polígonos industriales.

Para TIC hay varias partidas: un millón de euros en medidas que favorezcan los desplazamientos a pie, bici o bus, como la mejora de la Millennium; 350.000 euros en herramientas para turistas; 450.000 euros en monitorizar los beneficios de la energía sostenible y buscar un escenario de emisiones cero; y 550.000 en participación vecinal y administración electrónica.

Finalmente, en cuanto a las áreas desfavorecidas, se destinarían a fomentar el empleo con TIC (650.000 euros); espacios de feria (375.000); mercados municipales y entornos (2,35 millones); inclusión social de la población de asentamientos precarios (630.000); el centro de acogida de baja exigencia (545.000); la creación de un Observatorio de Igualdad con la UDC (450.000) y recuperar locales en desuso para actividades culturales, sociales o deportivas (500.000).

Tras asegurar la concesión de quince millones de los fondos, el siguiente paso es ahora descender a lo concreto en el desarrollo de esas 22 líneas de actuación, que Ayuntamiento y Hacienda comenzarán a negociar a partir de junio para desembocar en una hoja de ruta progresiva de licitaciones de obras.

El cronograma elaborado por el Gobierno local y consensuado con la oposición pretende adelantar ya para 2017 el inicio de actuaciones como la revitalización del comercio en la ciudad mediante la dinamización de los mercados de barrio y sus entornos, que prevé una inversión de 2,3 millones en cuatro años, así como la creación de un mapa de ferias especializadas en cada barrio, con un alcance entre ambas iniciativas de 25.000 personas beneficiadas económica y socialmente. Otras líneas de actuación a poner en marcha en los próximos meses es el desarrollo de nuevas herramientas TIC para mejorar la movilidad urbana a través de la tarjeta Millennium, nuevos recorridos peatonales, nuevos modelos de marquesinas del transporte urbano, dotación de energías renovables a centros sociales, restauración paisajística de lugares de interés turístico y la naturalización de espacios urbanos.

Estas actuaciones supondrán en su conjunto una verdadera puesta a punto de la ciudad y responden a una filosofía urbanística que busca la revitalización general de los espacios próximos a los ciudadanos más que colosales y costosas intervenciones en focos muy puntuales.

Los fondos europeos tienen pendiente aún una tercera convocatoria y aunque el concello de A Coruña no puede obtener fondos dos veces, existe la posibilidad de diseñar proyectos comunes con otros ayuntamientos para aspirar a iniciativas supramunicipales como la recuperación de la ría de O Burgo o la planificación del transporte metropolitano.

La oposición solicitó al Gobierno local, tras conocerse la concesión de los quince millones, ser tenidos en cuenta en la nueva fase de desarrollo de los proyectos. El alcalde, Xulio Ferreiro, manifestó su disposición a que la comisión que validó el proyecto presentado a Hacienda continúe como foro de seguimiento.

La colaboración y la responsabilidad de todos los grupos municipales es la mejor garantía para sacar adelante sin dilaciones esta batería de actuaciones que mejorarán la calidad de vida de los coruñeses en los próximos años. Es una oportunidad de revitalizar la ciudad que no puede desaprovecharse por minifundismos partidistas.