La apretada agenda de Hawking y su buena disposición en su visita a Santiago son ya una leyenda que ayer se multiplicó con el "récord histórico", según un asistente, que batió el archiconocido cosmólogo al ofrecer la rueda de prensa. No sólo la concedió (algo que no ocurrió cuando recibió el Príncipe de Asturias), sino que contestó a 23 preguntas de los periodistas, un hecho sin precedentes. Claro que fue una rueda de prensa especial, porque el científico tarda un minuto en "producir" un par de palabras, así que se preparó los "deberes" con un mes de antelación. Al final, quiso responder de viva voz, con su sintetizador, a doce de ellas, una por cada medio, y las once restantes las ofreció por escrito. A continuación, las cinco preguntas que respondió el cosmólogo a este diario y una selección de las restantes, de otros medios.

-¿Sabremos algún día por qué existe el universo y por qué existimos nosotros?

-La ciencia está contestando cada vez más preguntas que solían ser dominio de la religión. La cuestión última que la religión puede reclamar como propia es el origen del universo, pero incluso aquí la ciencia está haciendo progresos, y pronto debería proveer una respuesta definitiva a cómo empezó el universo.

-¿Seremos capaces de conocer algún día el pensamiento de Dios, como usted afirma?

-La cuestión es: ¿fue el modo en el que comenzó el universo escogido por Dios por razones que no podemos entender, o fue determinado por una ley científica? Yo creo en la segunda opción. Si le parece, puede llamar a las leyes científicas Dios, pero no sería un Dios personal, al que podría conocer y hacer preguntas, aunque si tal Dios existiera me gustaría preguntarle cómo llegó a pensar algo tan complicado como la teoría M en once dimensiones. Uno podría definir "Dios" como la encarnación de las leyes de la naturaleza. Pero dada esta definición, Dios no puede intervenir en el universo para romper esas leyes, porque Dios es la ley. Esta no es la visión usual de Dios como agente independiente.

-Dijo que no queda tiempo para esperar que la evolución darwiniana nos haga más inteligentes y que ahora toca la evolución del auto-diseño, para cambiar nuestro ADN. ¿Estamos abocados a un futuro en el que una super-raza domine al resto?

-Hay un proyecto para decodificar completamente la secuencia del genoma humano. Costó unos pocos miles de millones de dólares, pero es calderilla para un proyecto de esta importancia. Una vez leído el libro de la vida, se empezarán a introducir correcciones. Estoy seguro de que durante el próximo siglo se descubrirá cómo modificar, tanto la inteligencia, como instintos tales como la agresividad. Surgirán leyes contra la ingeniería genética con humanos, pero algunos no serán capaces de resistir la tentación de mejorar características humanas como el tamaño de la memoria, la resistencia a enfermedades o la duración de la vida. Una vez que aparezcan tales "super-humanos" habrá problemas políticos graves con los humanos no mejorados, que serán incapaces de competir. Presumiblemente morirán o se convertirán en irrelevantes. En su lugar habrá una raza de seres autodiseñados que se mejorarán a sí mismos a ritmos cada vez mayores.

-Hace diez años dijo que en dos décadas podríamos haber alcanzado una teoría física completa y unificada. ¿Lo cree aún?

-En 1980 dije que se podría encontrar una teoría del todo para finales de siglo. Sigue siendo mi previsión, pero teniendo por delante buena parte de este siglo. Si alguna vez logramos hallar una teoría del universo será un gran triunfo del razonamiento humano, pero no nos dejaría mucho que hacer. Necesitamos un desafío intelectual.

-Aún hay esperanzas de poder viajar en el tiempo, dijo una vez, con la teoría de supercuerdas. ¿Sigue pensando eso? ¿Sigue deseando que exista, en ese caso, una ley de protección cronológica que evite que un hijo mate a su padre antes de haber nacido?

-Si se pudiera volver a 1475, cuando nació Fonseca, sólo se podría observar su nacimiento pero no cambiar la historia. En cierto sentido se puede hacer eso de igual modo, porque se podría hacer una reconstrucción precisa de lo que ocurrió desde el punto de vista de la evidencia histórica. No se puede cambiar la historia. Se puede entender lo que pasó. No se puede volver y evitar que Fonseca naciera.

-(...) ¿Por qué desea viajar al espacio?

-(...) Deseo ir al espacio porque quiero alentar los vuelos espaciales tripulados, porque creo que el futuro de la raza humana deberá transcurrir en el espacio. Si la raza humana debe continuar durante otro millón de años, tendremos que ir, sin vacilación, donde nadie ha ido antes.

-Usted sostiene que el hombre podría desaparecer en los próximos mil años por causa de un desastre nuclear o vírico y que la solución pasa por colonizar las estrellas. (...)

-El futuro a largo plazo de la raza humana será en el espacio. Será ya muy difícil evitar un desastre en la Tierra en los próximos cien años, no ya en mil o un millón de años. Los humanos no deberían poner todos sus huevos en la misma cesta, o en el mismo planeta. Esperemos poder evitar que la cesta se caiga hasta haber esparcido la carga.

- ´La clave secreta del universo´ es su primera novela. ¿Es necesario comunicar de forma más eficaz los logros científicos?

-La baja estima en la que se tiene a la ciencia y a los científicos está teniendo serias consecuencias. Vivimos en una sociedad que está crecientemente gobernada por la ciencia y la tecnología, y sin embargo cada vez menos gente desea meterse en ciencia. Como un pequeño paso para enfrentar esto, mi hija Lucy y yo hemos escrito un libro para niños.

-Sugirió hace algún tiempo que el destino de la raza humana pasa por la colonización de otros planetas (...) ¿Es ciencia-ficción o hay posibilidades? (...)

-Nuestra experiencia con la Estación Espacial Internacional muestra que es posible que los seres humanos sobrevivan durante meses alejados del planeta Tierra. Sin embargo, la gravedad cero a bordo provoca numerosos e indeseables cambios psicológicos y debilitamiento de los huesos, así como problemas prácticos (...). Sería deseable, entonces, una base a largo plazo para que los seres humanos pudieran estar en un planeta o una luna. Perforando la superficie se conseguiría aislamiento térmico y protección frente a meteoritos y rayos cósmicos. El planeta o luna podría servir también como fuente de materias primas que serían necesarias si la comunidad extraterrestre tuviera que automantenerse independientemente de la Tierra.

-¿Cómo evolucionaría la física teórica (...) si no se detecta en el acelerador de partículas del CERN el bosón de Higgs?

-(...) Será mucho más interesante que no se encuentre la partícula de Higgs. Nos mostraría que algo está mal y que necesitamos volver a pensar sobre ello. Tengo una apuesta de 100 dólares a que no encontraremos el Higgs. Tanto el LHC como el programa espacial son vitales si la raza humana no quiere hacer el ridículo y, eventualmente, perecer. Juntos cuestan menos que un décimo del porcentaje del PBI mundial. Si la raza humana no puede permitirse eso, entonces no se merece el epíteto humano.

-¿Le preocupa el cambio climático? ¿Qué puede hacer la ciencia al respecto (...)?

-Mientras nos situamos al borde de una segunda era nuclear y un período de cambio climático sin precedentes, los científicos tienen una responsabilidad especial una vez más, de informar al público y aconsejar a los líderes acerca de los peligros que afronta la humanidad. Como científicos estamos aprendiendo cómo las actividades humanas y tecnológicas afectan a los sistemas climáticos en formas que podrían cambiar para siempre la vida en la Tierra. Como ciudadanos del mundo tenemos el deber de compartir el conocimiento. Tenemos el deber también de alertar al público de los riesgos innecesarios que vivimos cada día y de los peligros que prevemos si gobiernos y sociedades no toman acciones.

-(...) ¿Es seguro el experimento con el LHC del CERN?

-(...) Si las colisiones en el LHC produjeran un micro agujero negro, y esto es improbable, simplemente se evaporaría de nuevo, produciendo un patrón característico de partículas. Colisiones de esas y mayores energías ocurren millones de veces al día en la atmósfera de la Tierra, y no ocurre nada terrible.