Los magistrados adoptaron esta decisión por un estrecho margen, cuatro votos a favor por tres en contra, informó la cadena de televisión MSNBC. Respondían así a una decisión de un tribunal inferior recurrida por ocho parejas demandantes, que entendía que la actual legislación suponía una discriminación y negaba a dos personas del mismo sexo la unión civil y sus beneficios emocionales, sociales y financieros.

Connecticut ya permite las uniones civiles del mismo sexo, pero sin situarlas al mismo nivel legal que el matrimonio heterosexual. La decisión adoptada hoy por el Tribunal Supremo del Estado permitirá subsanar estas diferencias y, dado que no se puede recurrir a una instancia superior, se hará efectiva a corto plazo.