Un total de 39 alumnos de la Escuela Oficial de Idiomas de A Coruña han interpuesto reclamaciones individuales y colectivas ante esta entidad al no poder realizar un examen de inglés porque la profesora no contaba con suficientes hojas de la prueba para todos los estudiantes. "Tres grupos tenían que hacer el examen de nivel intermedio el pasado miércoles pero sólo uno realizó la prueba", señala Rocío Pedreira, una de las afectadas.

Los exámenes coincidían con la primera jornada de huelga de los profesores de las EOI gallegas, lo que provocó que tan sólo una de las profesoras encargada de las pruebas se encontrara trabajando. El primer grupo matriculado para la prueba -alumnos inscritos en el centro o que se presentan por libre- realizó el examen con normalidad. "El problema surge cuando vamos los otros dos grupos. Somos 39 estudiantes convocados para esa hora pero el aula se queda pequeña y no dispone de suficientes mesas y sillas. Además, la docente no tiene exámenes para todos", relata Rocío.

Ante esta situación, la profesora opta por pedir a los alumnos que compartan las hojas del examen, pero uno de los estudiantes le indica que esa acción es ilegal. "Otra de las alternativas que le dimos era coger los mismos exámenes de la otra clase, donde el profesor estaba de huelga y, por tanto, no se podía realizar la prueba", indica esta alumna coruñesa.

Los casi cuarenta alumnos matriculados para este examen -y que pagaron sus correspondientes tasas que le dan derecho a que le califiquen su nivel de inglés- no pudieron realizar la prueba pese a que el listado con los matriculados para el examen estaba visible en la entrada de la escuela, en secretaría, en el aula y en la web de la Escuela de Idiomas.

Ante esta situación, los alumnos afectados solicitaron el libro de reclamaciones. "Pedimos un libro oficial y sellado por la Xunta, necesario para cualquier negocio pero la escuela no tiene, ni tampoco hojas oficiales", indica Rocío.

"Esto es un delito para todos y para ellos, también. La Escuela no cumplió su parte del acuerdo, es decir, la fecha del examen y también es un fraude porque nos han cobrado por no hacer su trabajo", señala Rocío, quien explicó que de forma colectiva e individual, los 39 estudiantes han formalizado una reclamación en la que exigen la devolución del dinero de las tasas, una indemnización por daños y perjuicios (pérdida de dinero por el día de trabajo y transporte) así como que la prueba sea calificada de apta.