Casi la mitad de los establecimientos de hostelería de A Coruña (el 46%) infringe la actual ley antitabaco, lo que la sitúa como la provincia en la que más bares y cafeterías no respetan la normativa vigente y quince puntos por encima de la media autonómica. De los 195 locales coruñeses que la Xunta inspeccionó durante el pasado año, 90 incumplían algún aspecto de la ley, según los últimos datos de la Consellería de Sanidade. Una cifra muy por encima del resto de provincias: el porcentaje de bares que infringen esta norma es del 20% en Pontevedra, el 29% en Lugo y el 35% en Ourense.

La legislación antitabaco diferencia entre los locales de hostelería de más de cien metros cuadrados -donde es obligatorio separar las zonas de fumadores y las libre de humos- y los que tienen menos superficie, donde la decisión de permitir fumar o no queda a libre elección de los propietarios. En el caso de A Coruña son los restaurantes y cafeterías que superan los 100 metros los que más infracciones comenten. Siete de cada diez establecimientos de este tipo incumple la ley, un porcentaje que desciende al 69% en Ourense, al 36,8% en Lugo y al 31,4% en Pontevedra. A nivel gallego, los locales que no respetan la normativa (el 50,7%) superan por muy poco a quienes se adaptaron a las exigencias antitabaco del Gobierno central.

Son los bares y cafeterías más pequeños donde la ley encuentra más seguidores. A nivel gallego, el 73% de estos establecimientos respeta la normativa y en todas las provincias, el número de locales dentro de la legalidad supera a los que la vulneran. Pese a todo, A Coruña es una vez más la provincia en la que hay un mayor porcentaje de bares de menos de 100 metros que infringen la ley antitabaco. Uno de cada tres locales incumple algún aspecto, mientras en el resto de provincias no se supera el 25%.

Pese a que los técnicos de la Xunta percibieron 90 establecimientos coruñeses que incumplían la ley, tan sólo hubo 23 expedientes sancionadores incoados durante el pasado año, según los últimos datos de Sanidade. La mayoría fueron por permitir fumar en lugares en los que está prohibido a personas que encendieron un cigarrillo en esas zonas o por no diferenciar entre las áreas para fumadores y las libres de humo (seis sancionados en cada caso). Además, hubo cinco multas por una señalización ausente o deficiente y por vender productos no permitidos o a través de sistemas no homologados.

Reclamaciones

Al margen de las inspecciones rutinarias que realizan trabajadores de la Xunta, ciudadanos anónimos o miembros de los cuerpos de seguridad pueden presentar reclamaciones ante Sanidade cuando detecten alguna infracción. En este sentido, Pontevedra fue la provincia con más denuncias presentadas (145), seguida de Ourense (71), A Coruña (69) y Lugo (24). Los coruñeses protestaron en su mayoría (31 casos) porque un restaurante carecía de una zona libre de humos; en 26 ocasiones, porque dejaron consumir cigarrillos en áreas donde debía estar prohibido; en nueve, porque detectaron que alguien fumaba donde no se podía, y en otro caso porque la señalización de permitir o prohibir el humo del tabaco no era la correcta.

Los datos del Sergas revelan que 1.231 locales fueron sancionados en toda la comunidad durante los primeros cuatro años de la ley. Un periodo en el que responsables de la Consellería de Sanidade llevaron a cabo 11.500 inspecciones en locales de hostelería de toda la comunidad. Además, más de 1.300 ciudadanos reclamaron ante el departamento de Pilar Farjas una infracción de esta normativa.