Cinco de cada cien euros de la nueva financiación universitaria se repartirán en 2011 en función de los resultados que obtenga cada universidad. Este dinero estará condicionado al grado de cumplimiento de un total de veinte indicadores que aún se están perfilando. Lo que ya se tiene claro es que el baremo que tendrá más peso cuando se distribuyan los fondos será el de la investigación. De todas formas la intención de la Consellería de Educación es ir incrementando el porcentaje de financiación que quedará condicionada a los resultados. Se empezará por un 5% en 2011 y se tratará de alcanzar el 15% en 2015.

De este modo lo adelantó ayer el secretario xeral de Universidades, Alfonso Díez de Castro, tras cuatro horas de reunión con los vicerrectores de Economía de las tres universidades en el seno de la comisión creada para negociar la financiación universitaria. No se habló aún de cantidades económicas pero se avanzó en la estructura que servirá de armazón para sustentar el nuevo modelo económico que regirá hasta 2015.

El 95% de la financiación para 2011 será fija y se repartirá en función de los costes que tenga cada universidad. Para ello deberá realizarse un cálculo de los gastos y necesidades de cada institución académica. Como no hay tiempo para terminar este estudio, el próximo año aún se utilizarán los porcentajes de reparto que se venían aplicando hasta ahora (Universidade da Coruña, 26%; de Santiago, 43% y la de Vigo, 30%).

Pero además habrá una parte de los fondos que serán repartidos en función de los resultados. "Irá ligado a la medición de determinados objetivos", explicó ayer el secretario xeral de Universidades. Los fondos variables empezarán representando el 5% de la financiación total. "Nosotros desde siempre venimos defendiendo un reparto por resultados. Si esto es un comienzo a nosotros nos vale", comentó el vicerrector de Economía de la Universidad de Vigo, Xosé Álvarez García.

De mantenerse la financiación de 2010 para el próximo año, serían aproximadamente 15 millones de euros los que estarían sujetos a repartirse en función de los resultados. Para la distribución de este dinero se tendrán en cuentan al menos siete áreas de acción: la satisfacción de las necesidades sociales, la docencia, la investigación, la proyección internacional, la responsabilidad social, la gestión y los campus periféricos. "De todos ellos el que más pondera es la investigación", señaló Alfonso Díez de Castro. Durante la reunión de ayer Xunta y vicerrectores estuvieron concretando los indicadores que usarán para medir la eficacia de las universidades gallegas en estas áreas de acción.

La Xunta ha dado de plazo hasta el 15 de noviembre para que las universidades presenten su plan de austeridad en el que deberán recortar gastos incluyendo una reducción de plantilla.