Las aulas gallegas perdieron 24.000 alumnos en la última década, una sangría que ha dejado prácticamente vacíos muchos colegios de la comunidad autónoma. En Galicia un total de 228 centros escolares tienen ya menos de 25 alumnos. Son el 15% de todas las escuelas de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato que hay repartidas actualmente por el territorio gallego. Si la tendencia se mantiene estos colegios estarán abocados al cierre, al igual que ya lo hicieron otros 222 centros en los últimos cinco años.
La caída demográfica y el despoblamiento del rural no solo están causando la desaparición de escuelas sino que provocan que antiguas instalaciones escolares, preparadas para albergar a cientos de estudiantes, se encuentren ahora infrautilizadas y con aulas vacías.
Aunque entre los 228 colegios con menos de 25 alumnos se incluyen las 65 escuelas unitarias que hay en Galicia, el resto, un total de 163, son centros escolares tradicionales que han ido reduciendo poco a poco su matrícula de alumnado.
Estos colegios mantienen distribuidos sus menos de 25 alumnos entre los distintos cursos de Infantil, Primaria o Secundaria, de manera que habrá aulas en las que apenas haya estudiantes.
De estas 228 escuelas en riesgo de desaparecer, 120 se encuentran en A Coruña, lo que representa el 20% de los centros de esta provincia. En Pontevedra hay 65 (el 12% de todos sus colegios), 24 se ubican en Ourense (el 14%) y 19 en Lugo (el 10%).
El doble de la media
El caso gallego es una situación atípica puesto que en el resto del Estado, el porcentaje de centros con menos de 25 escolares es mucho menor, ronda de media el 7%, según los datos del Ministerio de Educación correspondientes al periodo 2008-2009.
En ese curso, en Galicia había un 17% de colegios con una matrícula inferior a los 25 estudiantes. Este porcentaje, sin embargo, bajó ahora al 15% debido precisamente a que en el último curso la Consellería de Educación decidió cerrar 18 de las escuelas unitarias con menos alumnado.
En los últimos cinco años el censo de colegios en Galicia pasó de 1.681 en el curso 2004-2005 a solo 1.490 en el actual periodo académico, es decir, desaparecieron un total de 222 centros, el 13% del total de escuelas dependientes de Educación.
La mitad de estos colegios que cerraron fueron escuelas unitarias (112). Cuando no cubren un cupo de matrícula de seis o más alumnos, la Xunta las suprime.
El resto son centros de Infantil, Primaria o Secundaria que se agrupan para concentrar a más estudiantes o, si la situación de falta de alumnado persiste, terminan transformándose en escuelas unitarias.
Cuando Educación cierra un colegio las instalaciones suelen pasar a manos de los ayuntamientos. Según explica el departamento que dirige Jesús Vázquez, normalmente son los concellos los que disponen de los terrenos para construir centros escolares. Cuando dejan de tener uso, la Xunta los desafecta y vuelven a pasar a ser titularidad de los municipios. Muchas de las escuelas unitarias se convierten en locales sociales para uso de los vecinos.
Matrículas
Tras la desaparición de estos centros está la crisis demográfica, que deja cada año las aulas sin una media de 2.400 alumnos. Solo las aulas de Educación Infantil ganan escolares gracias al repunte de nacimientos de 2003. En este curso hay matriculados 10.401 estudiantes más que hace una década.
Sin embargo, al llegar a Primaria ya se aprecia el descenso en el número de matrículas, que pasaron de 135.455 escolares en 2001 a los 130.408 estudiantes matriculados el pasado año.
El descenso más acusado está en Educación Secundaria puesto que este curso acoge 29.115 alumnos menos que hace diez años.
La ventaja de esta reducción en el número de escolares es que Galicia tiene la séptima mejor ratio de alumnos por aula del Estado en los colegios de Primaria y ESO, según las estadísticas del Ministerio de Educación. En cada clase hay una media de 15,9 estudiantes. De hecho, Galicia es la tercera comunidad con más profesores por clase (2,11), solo por detrás de Cataluña, que tiene 5, y Murcia, con 2,13.
