La activista liberiana Leymah Roberta Gbowee, ganadora del Premio Nobel de la Paz, lideró un movimiento pacifista integrado por mujeres que logró el anhelado sueño de poner fin a la guerra civil que devastó Liberia entre 1989 y 2003.

Tras 14 años de un conflicto en el que murieron más de 200.000 personas, Gbowee unió a mujeres de distintas religiones para exigir el fin de la guerra, indica la página web del documental producido recientemente sobre su vida "Pray the devil back to hell" (Reza para que el diablo vuelva al infierno).

Según la fuente, miles de mujeres liberianas se trasladaron a Ghana en junio de 2003 para llevar a cabo una manifestación pacífica frente al lugar donde se llevaban a cabo las negociaciones entre los implicados en el conflicto, que habían llegado a un punto muerto.

Las activistas, ataviadas con una camiseta blanca, formaron un cordón alrededor del edificio y aseguraron que no se moverían de ahí hasta que se llegara a un acuerdo.

Las fuerzas de seguridad amenazaron con dispersar la concentración, a lo que ellas respondieron que de ser así, se desprenderían de su ropa y se quedarían desnudas en la calle, lo que disuadió a los militares de cualquier actuación.

Sus manifestaciones culminaron en el exilio de Charles Taylor, el hasta entonces presidente del país, y en la elección en 2006 de Ellen Johnson Sirleaf, ganadora hoy junto con Gbowee del Nobel de la Paz, como nueva presidenta de Liberia.

Además del Nobel, Gbowee ha recibido otros premios como el de la Fundación de la Biblioteca de John F. Kennedy al Valor y el Premio de la Fundación Gruber por su defensa de los derechos de la mujer.